GUERRA RUSIA-UCRANIA

Iberia, forzada a hacer escala en sus vuelos a China para sortear el espacio aéreo ruso

La aerolínea española incluye en su conexión de Shanghái a Madrid paradas para repostar en Roma o Atenas en sus vuelos chárter, debido a la mayor duración a la que obliga la ruta modificada tras la invasión militar de Ucrania

Imagen de seguimiento de vuelos en Europa y Asia de la web Flightradar.

Imagen de seguimiento de vuelos en Europa y Asia de la web Flightradar.

David Page

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La aviación comercial encuentra otro obstáculo en su proceso, aún incipiente, hacia la recuperación total tras el parón de su actividad provocado por la pandemia comercial. Y es que las aerolíneas se están encontrando con el impacto que tienen en sus operaciones las restricciones económicas cruzadas entre Rusia y las potencias occidentales en el juego de represalias por la invasión militar sobre Ucrania.

A finales de febrero, con la invasión militar sobre Ucrania recién iniciada, la Unión Europea vetó su espacio aéreo a todas las aerolíneas rusas y la inmediata respuesta del Kremlin fue vetar el sobrevuelo de su propio espacio aéreo a las compañías aéreas de 36 países, entre ellos España. El resultado es que cientos de compañías han de reorganizar sus rutas para evitar las prohibiciones, al tiempo que todas evitan sobrevolar también Ucrania por el peligro cierto de seguridad por ser zona de guerra.

Ante esta situación, Iberia ha tenido que introducir cambios en su operativa de vuelos a China para sortear el espacio aéreo ruso, lo que le ha obligado a introducir escalas en la mitad de sus vuelos para repostar y poder cubrir las distancias mayores al que le obliga el enorme rodeo que ahora tienen que dar los aviones.

Iberia cuenta con dos vuelos semanales entre Madrid y Shanghái. Se trata de operaciones chárter, que la compañía aérea del grupo IAG -el holding que integra también a Vueling y British Airways- opera para una agencia de viajes especializada en conexiones con el gigante asiático y no los comercializa directamente. Tras el establecimiento de sanciones de la UE y por parte de Rusia, Iberia tuvo que suspender uno de sus vuelos.

Para sortear el espacio aéreo de Rusia la compañía ha tenido que modificar el recorrido de los vuelos, y ahora realiza trayectos más largos sobrevolando Italia, Grecia, Turquía, Azerbayán, Georgia y Kazajistán hasta llegar a China. Los vuelos de Madrid a Shanghái siguen siendo directos, pero en las vuelos de vuelta Iberia se ha visto forzada a hacer escalas.

Durante las últimas semanas, Iberia ha estado haciendo escala para repostar combustible en Roma y desde hace unos días también las hace alternativamente en Atenas. Los viajes desde Asia a Europa son algo más largo que en sentido contrario y, además, en los vuelos procedentes de China los aviones viene no sólo con pasajeros, también con una gran cantidad de mercancías, lo que eleva el peso del aparato y el consumo de queroseno es mayor.