Aigües de Barcelona hace pruebas por si tiene que cortar el agua ante la sequía

Barcelona y su área metropolitana están haciendo pruebas para comprobar si el sistema resiste cortes de suministro de agua. La idea es estar preparados en caso de que no llueva y se declare la emergencia, que limita el consumo a 200 litros por persona y día. Según ha adelantado SER Catalunya y ha podido confirmar este diario, el objetivo de estos trabajos es asegurar que, si se aplican cortes, las cañerías no se ven afectadas.

También se está ensayando con posibles bajadas de presión en la red de abastecimiento. El agua, en el Área Metropolitana de Barcelona, circula a mucha presión para que llegue a todas las plantas de los edificios. Esto provoca que, en caso de reventón, el agua salga disparada, como un si se tratara de un géiser. Por tanto, en caso de un corte, cuando se retomara la circulación de agua, habría riesgo de que las tuberías sufrieran desperfectos. Por este motivo, los responsables del suministro trabajan para estar preparados ante un escenario que, pese a no estar ahora mismo sobre la mesa, tampoco se descarta.

Ensayo telemático

Los técnicos de la empresa Aigües de Barcelona (responsabilidad de AMB y Agbar) están trabajando para saber exactamente qué ocurriría si se cortara el agua. Fuentes de la AMB remarcan que no están abriendo cañerías ni ensayando in situ. Las comprobaciones que se realizan, aseguran, son a través de los sensores que hay en la red, de forma telemática. No son muy distintas de las comprobaciones habituales. La diferencia es que, esta vez, el horizonte de una bajada de presión o un corte de agua para reducir el consumo podría ser una realidad si las lluvias de otoño no son abundantes.

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Fuentes de Aigües de Barcelona reconocen a EL PERIÓDICO que llevan tiempo haciendo este tipo de pruebas. Su voluntad, siempre en coordinación con la AMB, es anticiparse para que, en caso de llegar al escenario extremo, no tener que improvisar. En estos momentos, desde el Departament de Acció Climàtica aseguran que con la actual situación de los embalses, si no llegan precipitaciones importantes, se podría declarar el estado de emergencia por sequía en diciembre en las comarcas de Barcelona (las abastecidas por los ríos Ter y Llobregat).

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Hasta la fecha, los municipios en los que se ha declarado la emergencia (en el Empordà y el Baix Camp) no han tenido que aplicar medidas como cortes de agua. Pero también es cierto que en todos los casos, son localidades con un número de habitantes muy pequeño si lo comparamos con Barcelona y el área metropolitana. Los cortes de suministro, en cambio, sí son una realidad (por horas) en algunos municipios con una red ineficiente y maltrecha por las fugas o en pueblos que no están conectados a la red y que reciben el agua de pozos que se han secado.