Todo el PP está contaminado por la corrupción

Señor Rajoy, después de oírle en el debate dando cifras y hablando de la extraordinaria recuperación económica de España y de los esperanzadores datos de empleo, le ofrezco gratis un magnífico trabajo de campo realizado desde hace años con el que podrá hacer una radiografía exacta de la situación real en nuestro país.

Mi cónyuge es autónomo y ha sufrido, y continua sufriendo, lo indecible para mantener su negocio, y con una cuota a pagar todos los meses que es la más alta de la Unión Europea. Mis hijas, las más formadas académicamente de toda nuestra familia, sobreviven como pueden intentando llegar a final de mes y sin poder planificar en absoluto su futuro. Muchos compañeros suyos viven desde hace años fuera del país. Soy funcionaria, y ya he perdido la cuenta del poder adquisitivo perdido durante la última década. Sin embargo, me siento privilegiada, porque resulta que estoy destinada en la Inspección de Trabajo y he visto la degradación, hasta límites impensables, de los derechos de los trabajadores: contratos temporales a tiempo parcial con los que es imposible vivir dignamente, un aumento escalofriante de los accidentes de trabajo y unas condiciones laborales que rozan la esclavitud. Pero tengo además otra atalaya magnífica para vislumbrar la realidad: soy voluntaria de Cáritas y veo la cronificación de la pobreza, que no se resuelve solo dando comida, sino con ayudas a la educación, con el acceso a una vivienda en condiciones y a un trabajo digno.

Hablar del expolio al que nos ha sometido su partido merecería un estudio aparte. Si fueran gente honesta habrían dimitido todos y habrían dado a su partido la oportunidad de regenerarse. Ustedes no tienen manzanas podridas, es que la tierra donde cultivan está contaminada.

En resumen, que no sé si usted miente deliberadamente cuando habla de la situación de nuestro país o es que no sabe realmente donde vive. Las dos opciones me parecen muy inquietantes.