Trànsit pide a la DGT que la formación para motoristas sea "eminentemente práctica"

El Servei Català de Trànsit ha reclamado más precisión a la Dirección General de Tráfico (DGT) sobre las medidas que ha anunciado para endurecer la normativa para motoristas. Una de estas son los cursos obligatorios que deberán realizar los conductores de turismos con el permiso B que quieran circular con motos de hasta 125 centímetros cúbicos. Hasta ahora, la norma establecía que tras, tener tres años el permiso B, automáticamente se podía conducir este tipo de motos.

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La DGT no ha concretado todavía cómo serán esos cursos. Desde Catalunya, Trànsit considera que esa formación debe ser "eminentemente práctica". Así lo defiende el director de este organismo, Ramon Lamiel, que pone como ejemplo los cursos que Trànsit ofrece a conductores que han querido aparcar el coche y pasarse a la moto. Han pasado por estas formaciones prácticas unas 5.000 personas, en su mayoría mayores de 45 años. 

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Por eso, Lamiel considera que la DGT debería apostar por que esta formación se realice en el momento de renovar el carnet de conducir y que sea práctica "desde el minuto 0", con conductores que se suban a la moto en una carretera para corregir malos hábitos. 

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Trànsit insta pues a potenciar, como se hace en Catalunya, la formación "eminentemente práctica", no sólo cuando se recuperen los puntos tras perderlos, sino también en el momento de renovarse el permiso de circulación. Lamiel remarca que no solo se requiere aprender conceptos legales y un test de valoración, sino también corregir malos hábitos encima de la moto por carretera.

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"La realidad de Catalunya es diferente a otros puntos del Estado. Aquí somos muy ‘moteros’: desde 2021 hasta 2023 las matriculaciones de motos han crecido un 11,5%, más que las de turismos", señala Lamiel que destaca que, tras la pandemia, se incrementó el uso de la moto para moverse por el área metropolitana. Otro elemento a destacar es que han subido las matriculaciones realizadas por personas mayores de 45-50 años.

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Si se analizan los accidentes de motos ocurridos en Catalunya y sus causas, la mayoría son de usuarios de entre 45 a 65 años que salen los fines de semana, principalmente sábados y domingos por la mañana. Sus siniestros son habitualmente por impacto con otros vehículos, ya sea lateral o frontal, tras una mala maniobra y no hay tantos por salida de vía. 

Bien equipados

"Estos motoristas seguramente ya van bien equipados, tienen medidas de seguridad pasiva incorporadas y no son personas que requieran que se les deba recordar el uso de casco y guantes adecuados", subraya Lamiel en alusión a la medida de la DGT que apuesta por obligar a los conductores de estos vehículos a usar en carretera casco integral o modular y a llevar guantes homologados.

"Los motoristas seguramente ya van bien equipados e incorporan medidas de seguridad pasiva"

Ramon Lamiel

— Director de Trànsit

Desde Trànsit se está a favor de reforzar cualquier medida de seguridad pasiva pero consideran que la mejor forma de afrontar "la preocupación por el aumento de la accidentalidad de motoristas" pasa por medidas en formación, información, mejoras en infraestructuras y control. Por eso, se quiere insistir, tras sus encuentros con asociaciones de fabricantes y motoristas, en hacer un mapa con rutas seguras que alerte de las carreteras que acumulan más siniestros.

Trànsit apuesta por más formación, información y mejoras en las infraestructuras

Trànsit también apuesta por mejorar la señalización en las carreteras para incrementar la seguridad de los motoristas, principalmente en las más concurridas los fines de semana. Además, considera que existe otro grupo de motoristas con riesgo de sufrir accidentes que son los que van y vuelven al trabajo a diario, principalmente en el área metropolitana. Para ellos, proponen habilitar un carril exclusivo para ellos, separándolos del flujo habitual de tráfico, en las carreteras con más siniestros como son las de entrada y salida de Barcelona por la zona norte.