Endesa tilda de poco "realista" el plan energético del Gobierno y advierte de problemas de suministro con el cierre nuclear

Muy ambicioso, pero poco realista. Así concibe Endesa el plan del Gobierno español de producir el 81% de la electricidad con renovables en 2030, recogido en el denominado Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC) que prevé instalar un auténtico aluvión de potencia eólica y, sobre todo, fotovoltaica. "No son cantidades realistas si tenemos en cuenta las estadísticas históricas, además de las dificultades técnicas en integrar la nueva capacidad en un periodo de tiempo tan pequeño", ha advertido el consejero delegado de la compañía, José Bogas, en la presentación de resultados ante los analistas, en la que ha advertido problemas de suministro tras el cierre de la central nuclear de Almaraz en 2027.

El dirigente recordó que el planteamiento del Gobierno es solo un primer paso, un borrador, que no será definitivo hasta junio del año que viene, por lo que puede ser enmendado. La compañía enviará sus alegaciones para hacer notar sus "incertidumbres" teniendo en cuenta las "dificultades técnicas de integración (en la red) de la nueva capacidad en un periodo de tiempo tan pequeño", así como la escasez de materiales, la "incremental" oposición social y las dificultades de financiación.

Tampoco cree que se puedan cumplir con los objetivos de almacenamiento, a través de baterías o bombeo (12GW); con la capacidad de electrolizadores (11GW) para generar hidrógeno verde, ni con el desarrollo de las interconexiones (de 3GW a 8GW). Y si por si todo eso no fuera poco, lanza una advertencia: "Finalmente, estamos preocupados por al seguridad de suministro tras el cierre de Alcaraz entre 2027 y 2028".

Bogas cree que en los dos próximos años se podrían instalar un total de entre 10 y 15 GW de energía renovable en el sistema. "Será muy difícil poner en operación más cantidad. Una cosa es lo que esperamos o nos gustaría, creemos que el objetivo es desafiante, pero debemos ser realistas", ha añadido. En este sentido, Bogas ha subrayado que el problema del aluvión renovable que viene no es tanto la reducción de los precios en el mercado previsión sino la volatilidad, con momentos muy bajos y otros muy altos. Endesa estima un precio de la electricidad en el mercado mayorista de entre 75-80 euros por megavatio-hora en 2030, que podrían llegar a los 60 euros MWh si se materializara el plan del Gobierno, frente a los 40-50 euros MWh que solía haber antes de la guerra. "En mi opinión de cara a 2030 no veremos precios de la electricidad bajos, pero sí una enorme volatilidad", ha insistido.

Resultados semestrales

Bogas ha realizado este análisis a partir de las preguntas de los analistas en la presentación de resultados de Endesa de enero a junio cuando la compañía obtuvo un beneficio neto de 879 millones de euros entre enero y junio, un 4% menos que el año anterior por la falta de extraordinarios. El año pasado, el resultado estuvo marcado por la plusvalía generada por la venta del 51% de su negocio de movilidad eléctrica (Endesa X Way) a Enel en 2022. En una comparación más realista, si se eliminan esos extraordinarios, el beneficio asciende a 734 millones de euros, un 20% más que el año anterior. La energética ha contabilizado una tasa fiscal efectiva del 29,5%, afectada por el gravamen extraordinario aprobado del Gobierno español que ascendió a 208 millones de euros. 

Con estas cifras y en un mercado que se dirige a su "normalización" respecto a los precios --caen alrededor del 55% respecto al año anterior tanto en electricidad (88 euros por MWh) como en gas (42 euros por MWh en España y 44,6 en el mercado holandés de referencia)-- la compañía aspira mantener sus objetivos a cierre en 1.400-1.500 millones de euros. Mantiene, así, su objetivo de beneficio bruto de explotación (Ebitda) en un rango de entre 4.400-4.700 millones de euros.

En los seis primeros meses, el Ebitda se ha situado en 2.476 millones, un 27% superior al del primer semestre del año anterior en términos comparables (excluyendo el impacto de la venta del 51% del negocio de movilidad eléctrica el año pasado). Este crecimiento se sustenta en la aportación positiva de todos los segmentos del Generación y Comercialización de la compañía, destacando 473 millones en el negocio de suministro de luz, gas y servicios a clientes, 214 millones en generación convencional, y otros 180 millones de la actividad de renovables.

Producción vendida

La empresa afirma que tiene vendida toda su producción propia de electricidad para 2023 y el 89% para 2024, en ambos casos a un precio de 65 euros por MWh, para evitar el recorte de los ingresos que realiza el Gobierno a quienes vendan su producción nuclear o hidráulica por encima de los 67 euros por MWh. Y anticipa que, de cara a 2024, si el nuevo Gobierno mantiene o elimina ese recorte la compañía mantendría "los mismos resultados".

En total, Endesa cierra junio con 10,5 millones de clientes eléctricos en España, misma cifra que a cierre del primer semestre del año anterior. De ellos, 6,9 millones están en el mercado libre (un 5% más) y 3,7 millones en el regulado (un 5% menos). En cuanto a movilidad eléctrica, mantiene el liderazgo en España en red de puntos de recarga con 16.600 a cierre del semestre, 5.500 más que un año antes.

En cuanto al negocio del gas, se redujo levemente el volumen total comercializado en un 5% hasta 49 TWh, debido al menor consumo en ciclos combinados y por parte de clientes (industriales y domésticos). La compañía tiene vendido ya el 90% del gas que compra para 2023 y el 65% para 2024. La base de clientes se mantiene estable en 1,8 millones.