El Gobierno refuerza su apuesta verde con el objetivo de producir el 81% de la electricidad con renovables en 2030

En medio de las proclamas del Partido Popular por cambiar el calendario de cierre nuclear, el Gobierno redobla su apuesta verde en la actualización en su hoja de ruta de energía y clima de cara a 2030: prevé que el 81% de la generación eléctrica venga de energías renovables, frente el 74% previsto en la redacción previa data de 2020, con un protagonismo especial de nuevas formas de entender la energía como el autoconsumo, la gestión de la demanda o el almacenamiento. El peso de las renovables en la energía final será del 48%. Esta es una de las principales magnitudes incluidas en la actualización del Plan Nacional de Energía y Clima (PNIEC), presentado este miércoles, en el que eleva un 22% las inversiones previstas hasta un total de 294.000 millones de euros, de los cuales el 85% corresponde a inversión privada.

En consulta pública hasta el 4 de septiembre, este plan es una forma de plasmar en papel la senda que regirá la política energética y climática de España en los próximos años de acuerdo con los mandatos de la Comisión Europea a los países para cumplir con los objetivos de reducción de emisiones. La renovación forma parte del marco normativo comunitario que reclama enviar un borrador con una actualización antes del 30 de junio. Pero el texto definitivo no verá la luz hasta dentro de un año, por lo que el Gobierno que resulte tras las elecciones del 23-J podría cambiar las medidas anunciadas este miércoles, aunque siempre sin reducir los objetivos planteados en el plan inicial, según fuentes del Ejecutivo.

El nuevo borrador incluye 107 medidas, 46 más que la redacción del plan original, con el fin último de conseguir una reducción de emisiones a 2030 de hasta un 32% respecto a 1990, frente a la meta del 23% que había en el PNIEC anterior. Para ello, además de más renovables y más electrificación (se prevé alcanzar el 34% de la economía), el objetivo de eficiencia energética se eleva hasta el 44% desde el 41,7% previo. "Nuestro objetivo parece ambicioso, pero es realista", ha asegurado la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en una entrevista realizada por el propio Pedro Sánchez.

Almacenamiento y autoconsumo

Para alcanzar el 81% de generación eléctrica renovable, el Gobierno prevé la instalación de 105 GW de renovables nuevas (59 GW en el PNIEC anterior). Esto supone que en 2030 habrá 76 GW (37 GW más) de potencia instalada de plantas fotovoltaicas y 62 GW (12 GW más) de eólica (3GW serán de eólica marina). En el apartado solar se incluyen 19 GW de autoconsumo, uno de los grandes protagonistas del plan al aumentar su presencia frente a los entre 9 y 14 GW que establecía la hoja de ruta del Gobierno tras el despliegue de los últimos meses. El año pasado se pusieron en marcha instalaciones con una potencia total de 2.649 megavatios (MW), cifra récord que prácticamente iguala el despliegue de toda la historia anterior al suponer una potencia acumulada en el mercado español de hasta 5.211 MW.

Pero más renovables implica también más almacenamiento energético —aumenta capacidad a 22 GW en 2030— y gestión de la demanda que sirva de sujeción al sistema. En cuanto a las tecnologías no renovables, se adelanta el cese de la actividad del carbón a 2025, en coherencia con lo ocurrido en los últimos años de reducción de actividad de estas centrales, según han explicado fuentes del Ministerio para la Transición Ecológica, y se mantiene el calendario de cierre nuclear, que aboga por la clausura de centrales entre 2027 y 2035, lo que supone reducir esta tecnología de los 7,3 GW actuales de potencia instalada a 3,1 GW.

Más electrificación y gases renovables

Además, se refuerza la penetración del vehículo eléctrico hasta 5,5 millones de coches de este tipo circulando al final de la década, un 10% más de lo previsto en 2019, que irá acompañada del despliegue pertinente de puntos de recarga, aunque no se cuantifica. También se estima una mayor penetración renovable en edificios (73%) a partir de bombas de calor o renovables térmicas y la renovación del parque de vivienda, con 1,38 millones de viviendas, frente a 1,2 millones anterior.

Además, destaca el papel del hidrógeno verde con11 GW de electrolizadores, dada la elevada penetración de este vector "esperada en la industria", que será uno de los sectores clave a descarbonizar. Esto supone una actualización al alza frente a la hoja de ruta del hidrógeno, aprobada en el otoño de 2020, y que fijaba como meta 4GW de electrolisis. Se incluyen entre las medidas la construcción del hidroducto H2Med entre Barcelona y Marsella, aunque sin objetivos concretos de generación. También se incrementa la producción de biogás llegando a los 20 TWh en 2030.

Menos dependencia

Tras la aplicación de las medidas incluidas en el plan, las actuaciones en materia de renovables y eficiencia reducirán la dependencia energética del exterior desde el 73% en 2019 al 51% en 2030, lo que además de mejorar la seguridad energética nacional tendrá un impacto muy favorable sobre la balanza comercial, suponiendo un ahorro de más de 90.000 millones de euros en importaciones. Esto supone prácticamente duplicar el impacto en el aumento de la independencia energética exterior previsto en la edición anterior del PNIEC.