17º TRIUNFO DE VERSTAPPEN

Fórmula 1: Alonso hace magia para volver al podio en Brasil

El piloto asturiano acaba tercero en un electrizante duelo final con Checo Pérez y aseguró por milésimas su octavo podio de la temporada con Aston Martin

Fernando Alonso, feliz con el tercer puesto en la carrera de Brasil.

Fernando Alonso, feliz con el tercer puesto en la carrera de Brasil. / Nelson Almeida / AFP

Laura López Albiac

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Pese a que sentenció su tercer título consecutivo hace un mes, Max Verstappen no ha saciado su voraz apetito. El piloto neerlandés ha hecho pleno este fin de semana en el Gran Premio de São Paulo, vigésima cita de la temporada, y después de imponer su ley el sábado en el sprint, ganaba también la carrera principal con mucha autoridad, elevando a 17 su récord de victorias por temporada.

Lando Norris, más competitivo de lo que esperaba McLaren en este escenario, intentó sorprender a Max, por dos veces, en la salida, pero en carrera no pudo frenar al de Red Bull, intratable en el cara a cara con el británico. Fernando Alonso lo dio todo para conseguir su octavo podio de la temporada, ejecutando una magistral defensa ante Sergio Pérez con el coche más veloz de la parrilla.

Después de tocar fondo en Austin y México, con doble abandono de Fernando Alonso y Lance Stroll, Aston Martin necesitaba un resultado favorable para despedir la recta final del campeonato con mejor sabor de boca. Y desde el viernes dejaron claro que en Brasil su ritmo era prometedor. Los de Silverstone apostaron por un híbrido entre el paquete aerodinámico viejo y el que estrenaron sin éxito en Estados Unidos. Y funcionó.

Charles Leclerc, incrédulo tras estrellarse con el coche en la vuelta de formación.

Charles Leclerc, incrédulo tras estrellarse con el coche en la vuelta de formación. / Isaac Fontana / Efe

La desgracia de Leclerc

El circuito de Interlagos nunca decepciona. Pese a ser una pista estrecha y con limitados puntos de adelantamiento, siempre hay sorpresas. El viernes, en clasificación entró en juego el factor meteorológico y este domingo, el primer golpe de efecto llegó antes de empezar la carrera. Charles Leclerc, que partía segundo en parrilla tras Max Verstappen, perdía el control de su Ferrari durante la vuelta de formación y se estrellaba contra el muro, lo que le dejaba fuera de carrera antes de empezar. "¿Cómo puedo ser tan desafortunado?", clamaba el piloto monegasco dar crédito a lo sucedido. Los daños en su monoplaza le obligaron a retirarse.

Su desgracia beneficiaba a los dos Aston Martin, que automáticamente ganaban una plaza para arrancar segundo (Stroll) y tercero (Alonso), respectivamente. Aunque las salidas son la especialidad de Fernando, tener tantos metros por delante hasta la primera curva no fue lo mejor para sus intereses. Norris, con una increíble maniobra, y también Hamilton les ganaron la posición a los dos coches de Silverstone.

En este punto se desató el caos. Un brutal accidente de Albon y Magnussen les dejó a ambos fuera de combate, arruinando también las opciones de Ricciardo. Bandera roja más que prematura, sin haber completado una vuelta. Y nueva oportunidad para los supervivientes en la 'resalida'.

Norris volvió a intentarlo, pero Verstappen reaccionó con más anticipación. Alonso atacó a Hamilton sin miramientos y lo adelantó para recuperar la tercera posición. Viendo el ritmo del Red Bull y el McLaren que le precedían, Fernando necesitaba frenar a los Mercedes para tratar de apuntalar sus posibilidades de podio.

Sin rendirse, Norris enseñó las garras de nuevo a Max, que controló la situación de forma impecable. Carlos Sainz, que había salido octavo, tenía a Stroll a su alcance. El canadiense, segundo en parrilla y sexto en la resalida, intentaba aprovechar su mejor ocasión de la temporada, con un ritmo. Checo, por contra, cumplidas 18 vueltas había escalado cinco posiciones para situarse cuarto, a la estela de Alonso, tras dejar atrás a Russell y Hamilton con mucha superioridad.

Verstappen y Alonso, primero y tercero, se rocían mutuamente en el podio de Brasil.

Verstappen y Alonso, primero y tercero, se rocían mutuamente en el podio de Brasil. / Nelson Almeida / AFP

Alonso, en el podio 'virtual'

Los Mercedes lanzaron el anzuelo y tras la parada de Russell, Red Bull llamaron a boxes a Checo. El mexicano, que volvió a la pista por detrás de Hamilton, protestó por radio por una estrategia que le obligaba a otra lucha con el heptacampeón, al que adelantaba por segunda vez.

La gestión de neumáticos, fundamental con las altas temperaturas en Interlagos, apuntaba a un final de carrera de alta tensión. Stroll volaba con los medios y arrolló a los Mercedes para ascender al 'top cinco'. Alonso completó con éxito su primer 'pit stop', conservando la tercera plaza y el podio virtual, aunque con 40 vueltas por delante, nada estaba decidido.

Los Mercedes, que hace un año fueron los más rápidos en São Paulo, con Russell y Hamilton copando las dos primeros peldaños del podio, no tenían las mismas sensaciones este fin de semana. El sábado, en la carrera sprint, los dos coches tuvieron muchos problemas de degradación, que se repitieron. Hamilton alertó al muro de sus dificultades ante la presión de Sainz, que venía con mucho más ritmo tras superar a Russell.

Checo Pérez, por delante de Fernando Alonso, durante un lance de la carrera de Brasil.

Checo Pérez, por delante de Fernando Alonso, durante un lance de la carrera de Brasil. / Amanda Perobelli / Reuters

Checo, la amenaza

Verstappen mantenía a raya a Norris, a cinco segundos, ambos a años luz del resto, mientras Alonso empujaba para evitar que Checo se acercara lo suficiente para contar con el DRS y Stroll rodaba en los mismos tiempos que el mexicano con el Red Bull. Aston Martin ofrecía un ritmo espectacular, pero quedaba un último empujón. Pérez lanzó un intento de 'undercut' al asturiano, pero el muro de Silverstone replicó con una rápida parada de Fernando, que volvia a pista con cuatro segundos de ventaja sobre el mexicano y neumáticos blandos nuevos para afrontar las últimas vueltas.

El mexicano, que defiende el subcampeonato ante Hamilton, acechó a Alonso hasta el final. El asturiano, sin velocidad punta y sufriendo en cada recta frente al Red Bull, dio una impresionante lección de pilotaje, maximizando todas las virtudes de su AMR23, sin poder gestionar neumáticos, intentando contener a Checo.

El adelantamiento de Pérez a falta de una vuelta parecía ya la sentencia. Pero Fernando no se resignó. En un circuito donde ganó sus dos títulos, en 2005 y 2006, recurría a su magia para sorprender de nuevo al mexicano en el rebufo y batirle bajo la misma línea de meta por 53 milésimas. Octavo podio más que merecido para Alonso, que iguala los 106 de Alain Prost como cuarto piloto de la historia que más veces ha subido al cajón, con Stroll completando la fiesta de Aston Martin en el 'top cinco'. Mientras las cámaras se centraban en el duelo Alonso-Checo, Verstappen se anotaba su 17ª victoria por delante de Norris.