Medida inminente

Barcelona puede ahorrar más del 7% de agua reduciendo la presión

Catalunya ampliará restricciones y declarará una 'preemergencia' por sequía la próxima semana

El Govern llama a "dar un paso más" en el ahorro de agua y defiende rebajar la presión del grifo

La desalinizadora de El Prat de Llobregat

La desalinizadora de El Prat de Llobregat / Joan Cortadellas

Guillem Costa

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Después de varias semanas de pruebas, Aigües de Barcelona ha constatado que reduciendo la presión del grifo se puede ahorrar hasta un 7,6% de agua. Y lo más destacado: esta compañía mixta (entre Agbar y el Área Metropolitana de Barcelona AMB) asegura que esta prueba no ha conllevado ninguna incidencia importante. Sin embargo, la empresa advierte de que no tiene previsto activar la medida hasta que el Govern decrete que Barcelona y alrededores entran en emergencia (o preemergencia, en caso de que esta nueva fase del plan de sequía que creará el Govern conlleve dotaciones domésticas más restrictivas).

Aigües de Barcelona advierte de que no tiene previsto activar la medida hasta que haya incumplimientos en las dotaciones máximas

"Las pruebas empezaron el 12 de septiembre y se realizaron en 15 sectores del total de las 160 zonas de regulación hidráulica (ZRH) sobre las que se actuaría para regular la presión", asegura Josep Lluís Armenter, coordinador del plan de sequía de Aigües de Barcelona. Está previsto que estas reducciones de presión se apliquen en los municipios que incumplan con las dotaciones máximas establecidas, siempre y cuando lo pida la AMB. ¿Y qué notarán los vecinos de estas poblaciones? "Es posible que los que vivan en los pisos más elevados de los edificios perciban la presión más baja", reconoce Armenter.

"Los que vivan en las plantas más elevadas de los edificios lo notarán"

— Josep Lluís Armenter, Aigües de Barcelona

El director de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA), Samuel Reyes, insiste en recomendar que esta medida se aplique aunque no se haya entrado en emergencia. Al haberse comprobado que se puede ahorrar un 7,6% del agua sin apenas complicaciones, opina Reyes que las empresas podrían aplicar ya las reducciones. ¿Y qué responde Aigües de Barcelona? No lo descarta, pero a día de hoy trabaja para aplicarlo en caso de que se decrete la emergencia (o esta fase de transición llamada preemergencia si se impone un límite de 200 litros por persona y día de media).

Dudas prácticas

Cabe recordar que estos 200 litros no son lo que consume un hogar, sino que se incluyen los gastos de hospitales, bibliotecas, museos, restaurantes y todos los servicios de las ciudades. Según apuntan desde Aigües de Barcelona, su plan de pruebas técnicas ha salido bien y ahora ya está todo preparado para que puedan empezar las reducciones de presión.

¿Hasta qué punto se puede bajar la presión? La empresa, a día de hoy, se plantea llegar a reducir un 20% la presión como máximo, lo que en principio no supondría ningún problema para los hogares, más allá de que el agua pueda salir con menos fuerza sobre todo en las plantas más elevadas. ¿La reducción podría causar problemas en las cañerías, la caldera o la lavadora? La compañía mixta afirma que no ha recibido ninguna queja durante las pruebas. La bajada de presión tendría que ser mucho más intensa, señalan fuentes de la compañía, para que surgieran este tipo de problemas.

¿Y las personas que, por decisión propia, ya han rebajado la presión de sus grifos, para ahorrar, qué deberán hacer? Es probable que tengan que aumentarla de nuevo en caso de que noten demasiado los efectos de la reducción. En Manresa o Mataró también se han llevado a cabo ensayos similares y se ha comprobado que se puede ahorrar parte del gasto gracias a estas medidas, sin riesgo para las cañerías y los electrodomésticos que requieren cierta presión. Aigües de Barcelona, hasta la fecha, tiene una eficiencia en su red de más del 80%, por encima de la media europea.

Besòs, pendiente

Aigües de Barcelona también ha anunciado los progresos en la ampliación de la potabilizadora del Besòs. La compañía asegura que se está trabajando ya para que pueda potabilizar más volumen de agua a través de la captación del Rec Comtal. Sin embargo, se retrasa la potabilización directa de la superficie del rió Besòs, que estaba prevista para principios de 2024: "Se han priorizado otras obras en marcha".

La empresa reivindica la regeneración, con menos consumo energético que la desalinización, como principal antídoto metropolitano contra la sequía. Este método, que ya se aplica en el Llobregat y que sirve, junto al agua desalada, para no depender tanto de los pantanos, se tendría que acelerar en el entorno del Llobregat, según reclama Aigües de Barcelona.

El acuerdo para que esto sea una realidad se incluyó en los pactos políticos alcanzados para aprobar los últimos presupuestos de la Generalitat. El director de la ACA está convencido de que lo veremos antes de 2030. Àngels Vidal, directora de ecofactorías de la empresa, remarca sus ventajas: "No solo ofrece resiliencia ante las sequías, sino que, si el agua regenerada se mantiene para siempre, se pueden liberar recursos naturales de los ríos para que se mantengan en el ecosistema".