historias de apasionados por la observación del tiempo

"En invierno me reñían por abrir siempre las ventanas"

Sergi Corral, consultando su estación meteorológica.

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A pesar de tener solo 26 años, Sergi Corral ya tiene tablas en el mundo de la meteorología. Biólogo de profesión, es colaborador del Servei Meteorològic de Catalunya llevando el observatorio del barrio de Sant Andreu. También aporta su granito de arena en la red Meteoclimatic y es cofundador de la revista digitallanostrameteo.com. Su afición le nace en los veraneos de su infancia.«Tanto en L'Escala como en la montaña riojana los fenómenos meteorológicos están a la orden del día».

Y así se fue instruyendo en el tema.«Poco a poco fui formándome a través de diversos cursos».Toma nota, tres veces cada día, de las temperaturas máximas y mínimas. Luego se conecta a internet, las comparte con sus compañeros y entre todos las comparan y comentan. Esta nueva afición no acabó de sentar del todo bien en su casa:«En invierno me echaban la bronca por estar siempre abriendo y cerrando las ventanas».Aunque reconoce que a día de hoy los ha ganado para su causa:«Cuando no estoy en casa recogen los datos por mí».

Incluso consiguió aficionar a su abuela, que con 80 años le llegó a comentar uno de los mapas del tiempo de Alfred Rodríguez Picó. Precisamente ese fue su principal referente televisivo, y destaca la importancia de tener uno:«Han contribuido a crear una culturilla sobre el tema que engancha a la gente de la calle».Queda con otrosmeteolocospor internet para cazar tormentas, aunque reconoce que ha tenido algún susto, como una granizada que le pilló pescando, o como un banco de niebla que se formó estando en el mar:«Pierdes la orientación por completo».