'Making-off' de las negociaciones

Reconstrucción del pacto PSOE-ERC: siete días de vértigo y una cita en un hotel del Poblenou

¿Qué han pactado el PSOE y ERC? Todas las claves del acuerdo para la investidura de Sánchez

ERC y el PSOE sellan el acuerdo para la investidura de Pedro Sánchez

Las bases de ERC avalan el pacto de investidura con el PSOE con el 89% de apoyo

El ministro Félix Bolaños y el presidente de ERC, Oriol Junqueras.

El ministro Félix Bolaños y el presidente de ERC, Oriol Junqueras. / ERC

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Toda negociación tiene su punto de inflexión y la de ERC y el PSOE sobre la investidura de Pedro Sánchez llegó la tarde del 26 de octubre. Los republicanos, hartos de la falta de avances, decidieron romper su tradicional hermetismo para filtrar que el problema tenía nombre y apellidos: la falta de colaboración de la ministra y negociadora del PSOE María Jesús Montero. El movimiento molestó al equipo de la ministra, que hizo llegar su enfado al Palau de la Generalitat. Pero aunque entonces nadie lo sabía, acababa de empezar una semana de vértigo que acabaría desembocando en el acuerdo final. [Directo: última hora y todas las claves de las negociaciones]

La semana comienza con ERC jugando al despiste. La portavoz de los republicanos, Raquel Sans, admite el lunes en rueda de prensa que las negociaciones se "han intensificado", pero que el acuerdo está "lejos". En esos momentos, solo un núcleo reducido de personas sabe que en Madrid hay una reunión clave. Cara a cara, como antes de que la pandemia pusiera de moda la vía telemática. Por la parte catalana, las conselleres Laura Vilagrà y Natàlia Mas; la secretaria general de Presidencia, Núria Cuenca, y el líder de ERC en el Parlament, Josep Maria Jové. En la parte socialista, sus dos principales negociadores, los ministros Bolaños y Montero.

Que ERC haya puesto a la ministra en la diana surte su efecto. El PSOE toma consciencia de que debe mover ficha sobre todo en la carpeta que en esos momentos está más verde y la que implicará más quebraderos de cabeza: hacer una oferta para mejorar la financiación de la Generalitat. Entonces aparece la posibilidad de condonar una parte de la deuda de la Generalitat. No es el "fin del déficit fiscal" que pedía ERC, pero los republicanos transmiten que si la propuesta es en firme, la estudiarán con buenos ojos.

Pero ese mismo lunes, la foto entre el expresident Carles Puigdemont y el número tres del PSOE, Santos Cerdán, complica de nuevo las cosas para Esquerra. Los republicanos interpretan que el acuerdo Junts-PSOE sobre la amnistía ya es un hecho y no tienen la garantía de que incluya la causa del Tsunami Democrático y la de los CDR. Eso es tanto como decir que no tienen garantizada el regreso de Suiza de su secretaria general en el exilio, Marta Rovira. El PSOE no quiere exonerar las causas en las que sobrevuele la acusación de terrorismo.

Una castañada diferente

La solución a la amnistía llega el martes. Es el día de los 'panellets', las castañas y las calabazas para casi todo el mundo, menos para los negociadores de ERC y el PSOE, que tienen una jornada de 14 horas de reuniones vía Madrid, vía Barcelona e incluso vía Ginebra con la propia Rovira. Solo queda un empujón final para la amnistía y se fía a una conversación entre presidentes. 15 minutos de charla telefónica entre Pedro Sánchez y Pere Aragonès bastan para encontrar una salida: la amnistía también incluirá el terrorismo mientras no haya delitos de sangres. Los CDR y el Tsunami, finalmente, se verán beneficiados.

Que el pacto está cerca se certifica el miércoles por la noche. ERC convoca a su ejecutiva para el día siguiente, un paso que solo daría para comunicar un acuerdo. Como se convoca con poco margen de tiempo es telemática y reúne unas ochenta de personas. Hablan Junqueras, Rovira y Aragonès para explicar que ya no hay marcha atrás: Esquerra facilitará por segunda vez en cuatro años la investidura de Sánchez.

El ministro Félix Bolaños el jueves en la sede del PSC.

El ministro Félix Bolaños el jueves en la sede del PSC. / Marta Pérez / Efe

Por si hacen falta más señales, el jueves por la mañana por la parte republicana se confirma que ya hay acuerdo con Rodalies y que, por lo tanto, solo queda la carpeta de la financiación. El PSOE ni confirma, ni desmiente. La consigna es ceder la iniciativa a los republicanos, porque los socialistas tienen una negociación abierta con Junts que aún confían en cerrar ese mismo día. No lo lograrán.

Una foto y una efeméride

Para entonces, solo falta poner rostro al acuerdo ERC-PSOE. Ya se ha decidido que sean Junqueras y Bolaños, pero queda pulir el sitio, la hora y el formato. La propuesta socialista es un lugar lejos del centro para dar poco margen de llegar a las cámaras si hay una filtración descontrolada. El PSC propone el Hotel Hoxton, al lado de la Torre Agbar. Se conoce bien el barrio del Poblenou porque es donde está su sede.

Que socialistas y republicanos pacten no significa que se fíen. Cada delegación lleva a su fotógrafo y a su operador de cámara. Cada delegación enviará sus fotos a la prensa, aunque como gesto de buena voluntad, también las comparten entre ellos. Primero la imagen, y luego una charla distendida. Solo habían pasado siete días desde el enfado con Montero, pero el segundo pacto de investidura entre socialistas y republicanos acaba con final feliz.

El presidente de ERC, Oriol Junqueras, el jueves en la sede de ERC.

El presidente de ERC, Oriol Junqueras, el jueves en la sede de ERC. / Lorena Sopena / Europa Press

Queda un último paso. Se despiden y cada cual marcha a explicar el acuerdo ante los medios de comunicación. En la comparecencia, a veces parece que han firmado pactos distintos, pero cada uno tiene lo que quería. Los socialistas, a Sánchez más cerca de ser investido. Los republicanos, un soplo de aire a su estrategia del diálogo y evitar una repetición electoral.

Es dos de noviembre. Solo seis años antes, ese mismo día, Junqueras recibía en una sala de la Audiencia Nacional un veredicto entonces provisional aunque inapelable: prisión incondicional sin fianza por el 1-O. Allí empezarían 1.329 días de cárcel. Tras su comparecencia ante la prensa, alguien de su equipo hace notar la efeméride. Él prefiere explicar que se marcha, que es el cumpleaños de su hijo.

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