Negociaciones de investidura

El PSC pide huir de "personalismos y partidismos" para resolver el conflicto en Catalunya

El mediador y el estatus de Catalunya complican el pacto de Sánchez y Puigdemont

La amnistía augura un baile de sillas en ERC y Junts

El primer secretario del PSC, Salvador Illa, atendiende a los medios de comunicación en Les Franqueses del Vallès.

El primer secretario del PSC, Salvador Illa, atendiende a los medios de comunicación en Les Franqueses del Vallès. / ACN

Sara González

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En pleno toma y daca por la reclamación de Junts de que haya un mediador para guiar la negociación entre ambas partes durante la legislatura y el reconocimiento nacional de Catalunya como sujeto político, el PSC ha irrumpido en el debate -pese a que día sí y otro también se ciñe a la "discreción"- para reclamar que se huya de "personalismos" y de "partidismos" y lograr así que la interlocución no se vaya al traste. Se trata, ha advertido Salvador Illa, de aprovechar la "ocasión excepcional" que, a su juicio, brinda la aritmética de la investidura en la que trabaja Pedro Sánchez para conseguir poner fin al conflicto político en Catalunya. Un discurso que colisiona con el hecho de que los independentistas consideran que la amnistía no es un punto de llegada, como transmitió esta semana el 'president' Pere Aragonès en el Senado, sino un punto de partida para abordar el que considerar que es el gran nudo gordiano: que los catalanes decidan la relación con el Estado.

El líder del PSC ha esquivado meterse en camisa de once varas al ser preguntado sobre si es partidario o no del mediador que pide Carles Puigdemont, aunque sí que ha hecho una breve referencia a la pregunta sobre qué consideración debe tener Catalunya. "Tanto el Estatut como la Constitución son claros", ha espetado. En los dos textos, el concepto que impera es el de "nacionalidad", pero el expresident y líder moral de Junts exige que se produzca un acuerdo "histórico" en términos de reconocimiento con la fecha de 1714 como referencia.

Actuar "de buena fe"

"No toca ahora ni buscar la foto ni soluciones a situaciones que cada uno puede tener ni aprovechar la coyuntura para proyectos políticos en clave particular", ha sentenciado sin mencionar, esta vez, la petición de referéndum que hace ERC o la amnistía que forma parte del epicentro de las negociaciones. En todo caso, sobre esta exoneración de las causas del 'procés' que tantas ampollas levanta en la derecha, Illa ha advertido de que es hora de actuar de "buena fe" y pensando en el país que "se dejará a las generaciones futuras" ahora que está en juego tanto la gobernabilidad de España como lo que considera que puede ser una "solución" a un conflicto que "ha consumido demasiada energía" tanto en Catalunya como en España.

Y es que en las filas socialistas impera el convencimiento de que la amnistía puede tener el mismo efecto que tuvieron los indultos para desescalar la tensión y, a la vez, desactivar la fuerza electoral del independentismo. Sin embargo, aunque no pongan el referéndum como condición 'sine qua non' para dar su sí a Sánchez, ERC aboga por el acuerdo de claridad para fijar las bases de una votación y Junts, que ha dejado claro que no renunciaran verbalmente a la vía unilateral para alcanzar sus aspiraciones, sitúa la autodeterminación en una segunda fase para abordarla durante la legislatura aprovechando que sus votos serán clave para el PSOE.

"Alto al fuego"

Illa, que se ha reunido este domingo con el alcalde socialista de Les Franqueses del Vallès, Juan Antonio Corchado, también ha manifestado "orgullo" por el papel desempeñado por Sánchez ante el conflicto entre Israel y Gaza y con la petición de un "alto al fuego humanitario".