Elecciones municipales 2023

El PSC avisa que "la credibilidad" de Aragonès está en jaque por incumplir acuerdos de los presupuestos

¿Quién ganará las elecciones? Estas son las predicciones más allá de las encuestas

Aragonès achaca las incidencias de Rodalies a "años de dejadez" por parte del Gobierno

El líder del PSC, Salvador Illa, en un consejo nacional de su partido

El líder del PSC, Salvador Illa, en un consejo nacional de su partido / ENRIC FONTCUBERTA / EFE

Sara González

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Dice el líder del PSC, Salvador Illa, que quiere que la campaña de las municipales sea respetuosa y no tensa, pero sin haber empezado oficialmente, Govern y socialistas se tiran los platos a la cabeza a cuenta del caos en Rodalies y del fiasco organizativo de las oposiciones de la Generalitat. El jefe de la oposición ha hurgado este lunes en los incumplimientos que se están produciendo del acuerdo de presupuestos, muy especialmente el de la B-40, cuyo convenio se pactó que estuviera firmado como muy tarde el 31 de marzo. No ha sucedido.

Y esto le sirve a Illa para advertir al 'president' Pere Aragonès de que tiene "comprometida su credibilidad". Ambas partes decidieron darse un margen adicional para rubricar el compromiso de ejecución del polémico tramo entre Sabadell y Terrassa antes de las municipales, pero se ha superado también este calendario y, según los socialistas, el contexto electoral tiene mucho que ver en ello. Y es que para ERC, especialmente para sus candidaturas municipales en el Vallès Occidental, supone un mazazo aceptar, justo antes de pasar por las urnas, un proyecto que históricamente han combatido.

"Un acuerdo se cumple. Y, si no se cumple, se explica por qué no se puede cumplir", ha espetado el líder del PSC. Illa ha añadido que tiene "mucha paciencia" y "bastante tenacidad", y que, por su parte, cumplirá "a rajatabla" con lo firmado, pero ha dejado en el aire la duda de si Aragonès hará lo mismo. "No saldrá de mi boca nada que pueda comprometer acuerdos como este", ha sentenciado.

A sabiendas que no beneficia electoralmente a los socialistas, tampoco tiene Illa especial interés en que el caos de Rodalies sea protagonista del intercambio dialéctico de esta campaña, como sí pretende hacer ERC, dispuesta a exprimir el argumento de que la desinversión durante décadas por parte del Estado es la causa que provoca deficiencias endémicas en la red ferroviaria. La exigencia de traspaso de la gestión vuelve de nuevo a la palestra mientras la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, niega que no es posible legalmente.

Sin embargo, sí que aprovecha la ocasión para señalar que otro asunto pendiente que cuelga del pacto de presupuestos es la firma del contrato programa de Rodalies. A su juicio es esto, y no la gran alianza de partidos que reclama el 'president', lo que puede encarrilar los "problemas de planificación de movilidad" que reconoce que tiene Catalunya a nivel ferroviario, viario y aeroportuario. Se trata, ha subrayado, de un marco para poner en marcha una "dinámica de colaboración" y no de "confrontación" para revertir la situación. "Quejándonos no lo resolveremos, colaborando sí", ha resumido.

"Subordinar" el caso Borràs al 28-M

Para Illa, que arranque la campaña electoral no puede ser motivo para que se "paren las máquinas" de la gobernabilidad. Sin embargo, no aclarado si cree que el Parlament debería celebrar un pleno antes del 28 de mayo para relevar a Laura Borràs al frente de la presidencia. El foco lo ha centrado en que esta cuestión debería haberse resuelto "en septiembre" y en que los grupos independentistas han rechazado el mecanismo de revocación que propuso su grupo en el pleno de la semana pasada.

Según el jefe de la oposición, lo que están haciendo ERC y Junts es "condicionar" este asunto a las elecciones, cosa que considera que es un "error" porque supone "subordinar las instituciones a intereses electorales".