Aragonès achaca las incidencias de Rodalies a "años de dejadez" por parte del Gobierno

El President de la Generalitat, Pere Aragonès, ha tachado de inaceptables e inexplicables las incidencias del servicio de Rodalies esta semana en la R2, y ha asegurado que son "fruto de años de dejadez" por parte del Gobierno en la gestión de Renfe en Catalunya.

El 'President' ha propuesto articular una "alianza de país" entre administraciones, agentes socioeconómicos y entidades de la sociedad civil para exigir al gobierno español el traspaso de Cercanías de Catalunya y las inversiones necesarias al servicio. Aragonés plantea poner en marcha este frente común "a partir del 29 de mayo": "A pesar de que no tendría que ser así, dejaremos pasar las elecciones municipales si esto tiene que facilitar el consenso".

Inversiones necesarias

"Esto se tiene que acabar, hace falta un punto de inflexión bien claro de una vez por todas y que se lleven a cabo las inversiones que son absolutamente necesarias", ha aseverado. Aragonès ha defendido que "probablemente si esto estuviera pasando en algún otro territorio hubiera sido una cuestión de Estado, pero como pasa en Catalunya se considera que no es importante".

Así, ha instado al Gobierno a traspasar la gestión de las vías y los trenes de Rodalies a la Generalitat si desde el Ejecutivo central no se ven capaces de llevar a cabo la modernización del servicio."Esta dejadez por parte del Gobierno se tiene que acabar porque conlleva incertidumbre, dificultades y molestias continuadas a la población catalana", ha recalcado.

Carta a la ministra de Transportes

Aragonès ha trasladado por carta a la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, que "la preocupación por el mal funcionamiento crónico del servicio de Rodalies es máxima", y ha censurado cómo ha reaccionado el Ejecutivo central ante la última avería: "Es del todo inaceptable".

En la misiva, el 'president' tacha a Rodalies de "servicio público deficiente": "La grave avería en la estación de Gavà que tendrá el funcionamiento de la R2 Sur bajo mínimos es un caso paradigmático", señala. Además, afirma que este no es "en ningún caso un hecho excepcional", sino que es una más de las incidencias que se dan en este servicio de trenes de cercanías.

Con relación a este episodio en concreto, que quemó instalaciones de comunicaciones automáticas del sistema ferroviario, Aragonès lamenta la "inaceptable" reacción del Gobierno del que forma parte Sánchez: "Nadie asume la responsabilidad y las respuestas que se ofrecen se limitan a excusas poco convincentes y que en ningún caso resuelven el problema estructural".