Romper el techo de cristal, el reto para las mujeres

El otro día asistí a la celebración de los 50 años de deporte femenino del Atlètic Hockey Club Terrassa, y me dio mucho que reflexionar. ¿Tenemos las mujeres un techo encima y no podemos ir más allá?

A lo largo de los últimos años hemos realizado grandes avances, pero aún nos queda mucho por recorrer. ¿Cómo puede ser que, a día de hoy, las diez futbolistas mejor pagadas del mundo no lleguen a los dos millones de euros en conjunto? Salario que tienen varios jugadores de los equipos de Primera División. ¿O qué se siga utilizando a la mujer como imagen decorativa en las entregas de premios de ciclismo y Fórmula 1?

¿Es qué nadie se ha dado cuenta de que en las dos últimas olimpiadas (Londres 2012 y Río 2016), las mujeres obtuvieron más medallas que los hombres? Hemos estado desperdiciando el talento femenino y ya no nos lo podemos permitir más. Hace falta un cambio radical de mentalidad; romper con los estereotipos y el lenguaje cotidiano establecido, que a veces ni las propias mujeres cuestionamos. Pero, sobre todo, conseguir visibilidad, porque ¿cómo pretendemos que los deportes femeninos obtengan la misma repercusión que los masculinos si no se muestran por igual? Tenemos que dejar de normalizar todo aquello ridículamente aceptado y empezar a cambiar las cosas. ¡Valemos mucho!