Refuerzo en la ciudad y muchas lentejas: así afrontan los supermercados la 'operación despensa'

Con agosto en tiempo de descuento, los supermercados han puesto ya en marcha la maquinaria para hacer frente a lo que llaman 'operación despensa': una compra de grandes dimensiones para llenar armarios y nevera después de las semanas de vacaciones. Tal como repasa este lunes la Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados (ASEDAS), la Dirección General de Tráfico ha señalado el periodo que va del jueves 31 de julio al domingo 3 de agosto como el de la 'operación retorno'. Y las principales empresas de distribución alimentaria ya se están preparando para atenderla.

La clave, apunta este organismo, es tener en cuenta los dos elementos más claramente asociados a este momento del año: que las compras dejan de hacerse en supermercados de costa o pueblos de interior y de montaña, y que hay determinados productos que están mucho más demandados.

"Durante los meses de julio y agosto, alrededor de 1.500 supermercados situados en zonas de costa -incluyendo los dos archipiélagos-, pueblos de interior y montaña han reforzado su servicio ante el alza de la demanda; ahora, estos mismos consumidores a los que se ha atendido concentrarán sus compras 'de despensa' en sus supermercados de referencia habituales", profundiza ASEDAS, respecto a lo primero, en un comunicado.

En cuanto a los artículos que más salida tienen una vez la gente regresa a casa después del periodo vacacional, la estrella son las legumbres ("Registran el mayor incremento de ventas respecto a los meses anteriores, de casi un 50%"), pero también carne fresca como la de vaca, pollo y cerdo o transformada como son las salchichas. El pescado se vende más congelado y las verduras más populares son aquellas que sirven de base para cocinar: pimientos, zanahoras, calabacines o puerros.

Control automatizado del surtido

"La vuelta de vacaciones es, junto con la Navidad, un momento clave en la cadena logística de la distribución alimentaria para dar respuesta a cambios bruscos en las tendencias de consumo", analiza la directora de comunicación de esta asociación, Nuria Cardoso. "La capacidad de previsión y de reacción que tienen nuestras empresas, en colaboración con el resto de la cadena de valor, es fundamental para responder con eficacia a este cambio en la demanda del consumidor, que se concentra en unos pocos días", añade.

La clave, dice, es un control automatizado del surtido, una estrategia "que ofrece la capacidad para prever la afluencia de público que se espera en las tiendas urbanas y los productos que más se suelen consumir en estas fechas".

También ser consciente de que el distribuidor mayorista, que, según estos datos, da servicio a aproximadamente el 65% de las tiendas franquiciadas y asociadas del país, está asimismo en plena operación trasvase: de suministrar a hoteles y restaurantes costeros, a los supermercados del centro de la ciudad.