Punta de cuchillo

Lentejas a 165 euros

PAU ARENÓS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La alta cocina francesa necesita que la quieran: periódicamente los chefs organizan actos de autohomenaje, patrocinados por el Estado, en busca de palmaditas en la espalda. Que no se les amustien las crestas. Jamás las autoridades españolas han apoyado a los cocineros locales con el ardor del Elíseo: debe de ser el único sector de la cultura que no es reconocido como tal ni recibe subvención.

El último acto de desagravio y bombo sucedió el 19 de marzo en el palacio de Versalles y sentó al ministro de Asuntos Exteriores y a 650 invitados. El impulsor fue Alain Ducasse, de profesión, sus estrellas Michelin, que no tiene suficiente con ser rico y dirigir 24 restaurantes en distintos husos horarios, sino que además quiere doblegar cocinas y cocineros. «¿Quién quiere una cocina experimental o mutante?». En su tiempo, la nouvelle cuisine fue experimental, o mutante. Pero, ¿alguien  lo recuerda? «Solo la [cocina] francesa podía organizar una operación así».

Que te confiten en grasa de pato, Ducasse. Y a ver si dejas de servir cocina aburrida. Las lentejas con caviar del Plaza Athénée cuestan 165 euros. El plato de lentejas más caro y obsceno del mundo.