Una nueva ave migratoria elige Andalucía como destino invernal

Los ibis calvos, una especie de ave en peligro de extinción, han cambiado su destino migratorio de Italia a Andalucía debido a sus mejores condiciones climáticas y al cambio de térmicas en los Alpes. En dos semanas los tendremos aquí. 

Los ibis eremitas o ibis calvos (Geronticus eremita) son unas aves parecidas a los demás ibis, pero con la cabeza y el cuello sin plumas y de color rojo. Son una especie en peligro de extinción, que antiguamente se distribuía por Europa, África y Asia, pero que ahora solo sobrevive en algunas zonas de Marruecos y Siria. Prefiere los hábitats áridos y rocosos.

Estos singulares ibis son aves migratorias, que realizan largos viajes entre sus áreas de cría y de invernada. Sin embargo, el cambio climático está alterando sus patrones de migración, ya que afecta a la disponibilidad de alimento, agua y refugio en sus rutas. Por eso, algunos proyectos de conservación están tratando de enseñar a los ibis nuevas rutas migratorias más seguras y adecuadas.

Desde el Zoo de Viena

Uno de estos proyectos es el que lleva a cabo el Zoo de Schönbrunn en Viena, en el marco del proyecto LIFE de la UE, del que este zoológico es coordinador. El objetivo del proyecto es reintroducir estos ibis en Europa, donde se extinguieron hace más de 300 años.

Para ello, se crían ibis calvos en cautividad y se les enseña a seguir a un ultraligero pilotado por un humano, que les guía por una ruta migratoria que va desde Austria hasta la Toscana en Italia para que pasen el verano.

El proyecto comenzó en 2003 y desde entonces se han liberado casi 300 ibis calvos en la naturaleza. Algunos de ellos han aprendido a migrar por su cuenta, sin necesidad del ultraligero, y han formado sus propios grupos.

Guía turístico

Otros han seguido al ultraligero cada año, formando una relación especial con el piloto. El proyecto ha logrado establecer una población silvestre de ibis calvos en Europa, que actualmente cuenta con unos 100 individuos.

Sin embargo, el cambio climático sigue siendo una amenaza para los ibis calvos, ya que puede provocar fenómenos meteorológicos extremos, como sequías, inundaciones o tormentas, que dificultan su supervivencia.

Por eso, el proyecto también monitoriza el estado de salud y el comportamiento de los ibis calvos mediante dispositivos GPS y sensores biométricos. Así se puede evaluar el impacto del cambio climático en estas aves y adaptar las medidas de conservación.

Cambio de rumbo

Este año, los ibis calvos han mostrado un comportamiento diferente al habitual. En lugar de seguir al ultraligero hasta la Toscana, donde normalmente pasan el verano, han decidido continuar su viaje hasta Andalucía, donde pasarán el invierno. Se supone que el gran viaje comenzará en unas dos semanas.

“Debido a las temperaturas más cálidas del otoño, las aves comienzan su viaje hacia el sur cada vez más tarde. Entonces ya no encontrará térmicas adecuadas en los puertos alpinos. Dado que los ibis calvos del norte dependen de las corrientes térmicas para cruzar los Alpes, muchas aves ya no logran cruzar los pasos. Un viaje a Andalucía evita este problema”, explica Johannes Fritz, responsable del proyecto, en un comunicado.

En Andalucía, los pichones pueden integrarse en una colonia sedentaria de ibis calvos del norte situada allí. Los investigadores esperan que regresen a las estribaciones del norte de los Alpes para reproducirse.

Clima más suave

La inspiración para el nuevo destino provino de un ibis calvo del norte macho criado en el zoológico de Schönbrunn, que se alejó más de 2.000 kilómetros para dirigirse a España cuando iba de camino a Italia. La idoneidad de esta área se determinará en un estudio de factibilidad para fines de 2024.

Los expertos creen que este cambio se debe también a las condiciones climáticas adversas que han encontrado en Italia, como las altas temperaturas, la escasez de lluvias y la falta de alimento. Andalucía ofrece un clima más suave y húmedo, así como una mayor variedad de hábitats donde encontrar comida y refugio.

Este cambio de ruta migratoria es un ejemplo de cómo los ibis calvos son capaces de adaptarse a las circunstancias ambientales y buscar las mejores opciones para su supervivencia.

Sin embargo, también implica nuevos retos para su conservación, ya que requiere una mayor coordinación entre los países implicados y una mayor vigilancia para evitar posibles amenazas como la caza ilegal o la colisión con tendidos eléctricos.

España, destino aviar

Según la Fundación Descubre, España es un país clave para la migración de las aves, ya que se encuentra en el cruce de tres continentes: Europa, África y Asia. Por eso, cada año pasan por España unos 30 millones de aves de unas 400 especies diferentes, que buscan condiciones climáticas y ecológicas favorables para su supervivencia.

Andalucía es, por otra parte, una de las regiones más importantes para la migración de las aves en España, ya que tiene una gran diversidad de hábitats y una situación geográfica estratégica.

Andalucía acoge a unas 6 millones de aves migratorias al año, de unas 200 especies distintas. Algunas de estas aves solo pasan por Andalucía en su viaje entre Europa y África, como las cigüeñas blancas, los milanos negros o los abejarucos. Otras se quedan a invernar en Andalucía, aprovechando sus temperaturas suaves y sus recursos naturales, como los flamencos, las grullas o los ánsares. Y otras incluso han cambiado su ruta migratoria y han elegido Andalucía como su destino final, como los ibis calvos, las águilas calzadas o las cigüeñas negras.