Educación y tecnología

73.000 alumnos catalanes de primero y segundo de ESO seguirán sin portátil hasta abril

¿Es posible mantener la atención del alumnado adolescente en aulas con un ordenador por pupitre?

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Aula de ESO de un instituto catalán, el curso pasado.

Aula de ESO de un instituto catalán, el curso pasado. / ZOWY VOETEN

Helena López

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El pasado 18 de octubre, hace ya algo más de un mes, EL PERIÓDICO publicaba las críticas de decenas de institutos por la falta de ordenadores portátiles para primero y segundo de ESO. Este miércoles, al fin, el Departament d'Educació ha puesto cifras al problema. 73.000 alumnos catalanes de primero y segundo de ESO ni tienen aún ordenador portátil ni lo tendrán hasta, como mínimo, el próximo mes de abril, cuando está previsto que llegue el último paquete de ordenadores ya licitado. Así lo ha reconocido el director general de Innovación, Digitalitzación y Currículum, Joan Cuevas, durante la rueda de prensa para anunciar el despliegue de la última fase del Plan de Educación Digital de Catalunya, que incluye el reparto de "más de 32.000 paneles interactivos (pizarras digitales), 4.000 kits de robótica y 2.700 maletas audiovisuales".

Catalunya continúa adelante con su plan de digitalización de las aulas en pleno debate sobre beneficios y riesgos de las pantallas

Y la denuncia hecha pública el pasado mes de octubre por este diario iba más allá. Los centros afectados por la falta de portátiles señalaban también que la Coordinación Digital de la conselleria les había comunicado que no sustituirían, tampoco, los ordenadores estropeados en el resto de cursos. Es decir, que el alumnado al que le fallara el portátil durante los próximos meses tendría que seguir todo el curso sin él (también hasta abril, cuando llegará una partida de 100.325 aparatos; los 73.000 pendientes, y el resto, para disponer de estoc para reponer los estropeados).

El Departament compra 100.000 ordenadores para cubrir ese déficit así como la falta de estoc para reponer equipos estropeados

Para esta última cuestión sí se han encontrado soluciones "inmediatas" -según ha explicado Cuevas- como la compra directa de 5.000 dispositivos o un plan de reutilización (de momento en fase de piloto en varios centros de Barcelona), que también debe servir para afrontar la matrícula viva.

La comparecencia este miércoles de la consellera Anna Simó y del director general llega en plena tormenta sobre la difícil gestión de las pantallas (todas; no solo los móviles) en el aula; un debate que no ha hecho cambiar una coma en el Plan de Educación Digital de Catalunya, cuya última fase ha sido presentada en un acto, eso sí, en el que una de las ideas más repetidas por ambos dirigentes ha sido [lo agitado de los tiempos casi obligaba] "el fomento del uso crítico de la tecnología por parte del alumnado".

Otra de las cuestiones que han destacado tanto Simó como Cuevas es que la totalidad de los centros tiene ya una estrategia digital de centro elaborada y aprobada y que todo el nuevo programario que se distribuirá en los centros está en lengua catalana, además de que la base de todo es "garantizar la equidad".

"Lucha contra la desigualdad"

"La tecnología no es un fin en sí misma, es una herramienta, y los centros tienen que ser capaces de aprovechar todo el potencial educativo que tienen esas herramientas", ha subrayado la consellera, quien también ha puesto énfasis en la necesidad de estimular la creatividad y fomentar las vocaciones STEAM, especialmente entre las chicas. "Este plan es una de las medidas más grandes de reducción de las desigualdades que este Departament cree que puede hacer", ha señalado convencida Simó, quien ha afirmado que entiende el debate y la preocupación sobre la entrada de la tecnología en las aulas, pero insiste en que, a sus ojos, este no es incompatible con el desembarco de pantallas en las escuelas.

Cuevas ha ofrecido también detalles de la inversión de esta última fase del despliegue del plan de educación digital: 90 millones en paneles digitales interactivos; 4,6 millones en maletas audiovisuales y 29,4 millones para equipamientos de robótica); que suma un importe total de 126,3 millones de euros.

Respecto al calendario previsto, los paneles digitales llegarán a los centros -si nada falla- entre este noviembre y marzo de 2025; aunque el 60% se instalarán este curso, según se ha comprometido Cuevas. Las maletas, por su parte, llegarán entre diciembre de este año y junio del próximo; y los kits de robótica, entre octubre y junio.

Por último, el director general ha apuntado que la entrega de material ha ido acompañada de una mejora en el wifi en todos los centros (otra de las grandes asignaturas pendientes). "Tenemos una cobertura ya del 99,9", ha asegurado.