Las escuelas retoman el curso con 3.500 nuevos profesores y una huelga en el horizonte

Un total de 3.566 docentes se incorporarán este lunes a los centros educativos de Catalunya para hacer efectiva la reducción de una hora lectiva a los profesionales pactada por el Departament d'Educació con los sindicatos el pasado septiembre. Desde el anuncio de la medida, los agentes implicados han realizado una valoración positiva del incremento de plantilla, pero las críticas también se han dejado sentir por el momento en que se pone en marcha. En concreto, se incorporan 1.431 docentes en primaria y 2.135 en secundaria.

Profesorado y direcciones han venido denunciando la sobrecarga de trabajo que supone tener que rehacer todos los horarios y han apuntado que la medida no permitirá en la práctica más tiempo de trabajo en equipo, aunque reconocen que disponer de más personal es siempre positivo. La vuelta al cole tras las vacaciones de Navidad se produce, además, con un escenario de huelga en el horizonte: el sindicato mayoritario en la escuela pública catalana, Ustec, y el minoritario, CGT, han llamado a sumarse a la huelga convocada por la sanidad pública los días 25 y 26 de enero.

A partir de este segundo trimestre, los maestros de primaria pasarán de dar 24 horas de clase en el aula a cumplir 23, y los profesores de ESO harán 18, y no 19 como hasta ahora. Cada centro ha aplicado la reducción de la hora lectiva en función de sus necesidades y realidades. La 'conselleria' ha defendido en todo momento que se ha realizado un acompañamiento a los centros para poder reorganizarse con los nuevos recursos y que se ha dado la "máxima flexibilidad". Entre las recomendaciones que ha dado Educació estaba intentar no sustituir a tutores ni maestros especialistas, e incluso superar al 10% de docentes con media jornada en un mismo centro si hacía falta. El objetivo era que la medida tuviera el menor impacto pedagógico posible, especialmente en un momento en que la comunidad educativa ve con preocupación el descenso del nivel competencial de los alumnos en todas las asignaturas, especialmente en matemáticas e inglés.

Escuelas e institutos han aprovechado estas semanas para 'fichar' nuevas incorporaciones. Las especialidades más solicitadas han sido maestros generalistas y de pedagogía terapéutica en primaria y especialistas de inglés en secundaria. En concreto, en la educación primaria se han pedido 646 mesteres de la especialidad de primaria, 267 de pedagogía terapéutica y 180 de inglés. En la ESO, la mayoría de centros han optado por profesorado de inglés (241), seguidos de los de orientación educativa (194), ciencias sociales (185) y tecnología (151). Por otra parte, dos de cada tres nombramientos (67%) se han producido para profesionales que ya estaban en los centros y que ahora completarán su jornada o alargarán una sustitución.

Ajustes en la hora del patio

La directora de la escuela Fort Pienc de Barcelona, Lourdes Mateu, aseguraba que la incorporación de más docentes es una "ganancia" y, pese a las críticas por cómo se ha hecho la gestión, deja claro que no quiere desvirtuar la medida. En su caso, este enero se incorpora una nueva docente, pero por decisión de todo el claustro no modificarán los horarios, sino que la hora reducida la sacarán de dejar de realizar dos medias horas de patio, que recuerda que también es horario lectivo. Esto permitirá que con la docente de más con la que contarán se pueda apoyar, de tal forma que habrá más tiempo con dos profesionales en el aula.

Mateu destaca que éste ha sido un acuerdo de su centro, donde muchos maestros dijeron que preferían que no se les tocara el horario y que, por el contrario, pudieran tener un docente que entrara durante una hora con ellos en el aula. Además, siguieron la indicación del Departament de ocupar en plaza con una persona que estaba haciendo una sustitución en el centro.

Esta directora apunta que existe una carencia de profesionales en el conjunto del sistema y afirma que cada vez hay más diversidad de alumnado. En este sentido, asevera que si se pregunta a muchos docentes, preferirían tener más horas de apoyo para poder atender a la gran diversidad que deben atender en el día a día.

Para el representante de secundaria en la Junta Permanente de Directores de Catalunya, Joan Cumeras, la liberación de una hora lectiva del profesorado supone dar respuesta a una reivindicación histórica. "Llevamos años haciendo una hora de más", ha recordado. De todas formas, el hecho de que empiece a aplicarse a partir de enero es "desafortunado" porque implica una gran logística para los equipos directivos de los centros y organizar los horarios "a toda prisa".

Más complejo en FP

Cumeras ha recordado que "la organización del curso ya está hecha", por lo que no se podrán modificar asignaturas que ya se imparten. Sin embargo, será necesario que los profesores reduzcan una hora lectiva y eso significa que hay asignaturas específicas que costará más de cubrir. "Se hace imposible cubrir una hora de cultura clásica o dos de francés a la semana", añade el representante de secundaria. Esta dificultad para encontrar docentes de determinadas asignaturas se complica todavía más en el ámbito de la Formación Profesional. "Hay centros que tienen solo un profesor de una materia, ¿cómo se cubrirá esta hora?", se pregunta Cumeras.

Uno de los colectivos de docentes que ya alertó de la poca idoneidad del cambio fue el Clam Educatiu. Domi Viñas, una de sus impulsoras, insiste en que llega en un momento "poco adecuado". Cree que existe cierta improvisación detrás de esta medida y constata que está habiendo mucha disparidad a la hora de aplicarla. En el caso del centro que ella dirige, el Instituto Escuela El Til·ler de Barcelona, tendrán un docente más en primaria y media dotación en secundaria. En cualquier caso, lamenta que estas incorporaciones no servirán para tener más espacio de codocencia o de debate y trabajo del equipo docente, ya que cada docente tendrá una hora más de forma individual. "No nos permite que existan grupos de docentes que puedan hablar, reflexionar o repensar proyectos educativos", comenta.