Sabadell se conjura para resucitar el mercado fantasma de Campoamor

El mercado municipal del barrio de Campoamor de Sabadell, conocido popularmente como el mercado fantasma debido a la poca vida dentro del edificio y que en los últimos años sobrevivía al limbo de su desaparición, experimentará en los próximos tres años un giro de 180 grados.

La galería comercial, que hasta ahora tenía habilitado un espacio para 37 paradas (pero únicamente dos están a día de hoy en funcionamiento), pasará a configurarse en tres espacios distintos con el objetivo de hacer sintonía, de redimensionarse y ajustarse a “la nueva realidad”, según ha apuntado la alcaldesa de Sabadell, Marta Farrés (PSC). 

Así habrá un supermercado, que se adjudicará a través de una licitación pública, ocupará la mayor parte de la espacio (1.110 m²). También se ha apostado por múltiples espacios sociales (500 m²) y el nuevo mercado dispondrá de un teatro, cuatro despachos para asociaciones del barrio y una sala destinada al alumnado del Instituto del barrio, Ribot y Serra ubicado delante del edificio municipal. Y, finalmente, y lo que hará mantener la esencia del mercado, se contará con cuatro paradas tradicionales (240 m²). 

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“Nueva centralidad del barrio”

La propuesta se traduce en un acuerdo, entre Gobierno Municipal (PSC y Junts), En Comú Podem y múltiples asociaciones vecinales del distrito sexto (que engloba cuatro barrios del sur de la ciudad). Un pacto presentado este miércoles 13 de diciembre ante los medios de comunicación. “El proyecto dinamizará y tiene la oportunidad de crear un nuevo entorno en el sur de Sabadell. Permitirá dotar el barrio de una nueva centralidad”, ha manifestado la alcaldesa durante la presentación del anuncio en el que también han asistido una cincuentena de vecinos. 

El proyecto tendrá un coste de 3,6 millones de euros y se prevé que el actual edificio se derribe después del verano de 2024 y, así, as obras de construcción empezarían en 2025. Si la tramitación y las obras van viento en popa, el consistorio augura que el nuevo equipamiento municipal se podría estrenar durante el 2026. 

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La pérdida de paradas

Al largo de los años, los propietarios de las paradas han ido marchando por varios motivos, de los que destacan: los cambios de consumo de la sociedad, la subida de precios de alquiler y la falta de renovación del edificio. 

“Desde 1982, cuando se fundó, no se ha hecho ninguna modificación. Entrar en el mercado es como hacer un viaje en el tiempo”, especifica el portavoz de la Plataforma de Veïns pel Mercat y presidente de la Associació de Veïns dels Pobles de Sud, Ramon Giménez, a este diario. 

La difícil situación empezó a acentuarse en 2010, año en que únicamente estaban en funcionamiento el 30% de las paradas. En 2016, se observó una tendencia “preocupante”: cada vez se marchaban más paradas. De hecho, en 2019 ya quedaban únicamente cuatro. “Si un mercado no se reforma ni se reinventa, enfrenta la posibilidad de desaparecer”, reflexiona Giménez. 

A partir de entonces no se ha revertido la situación y de hecho, a día de hoy hay activas únicamente dos paradas en funcionamiento (en enero, tres). En relación con estos comercios, el ejecutivo local detalla que su voluntad es reubicar estas paradas para que no tengan que parar su actividad durante las obras. 

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“Una lucha vecinal”

La dinamización del Mercado de Campoamor es una reivindicación que viene de lejos, pero concentrada, sobre todo, en los últimos cuatro años. En 2019 saltaron las alarmas de los barrios del sud de Sabadell. El Gobierno Muncipal (PSC y Podemos) había puesto encima de la mesa derribar la galería comercial para construir un equipamiento cultural con viviendas y comercio en los bajos. Una iniciativa que no halló consenso entre los vecinos del sud, ya que la necesidad de un mercado seguía sin cubrirse, según especifica el presidente de la asociación que tiene claro que el mercado de Campoamor “ha sido una lucha vecinal”. 

Giménez detalla que durante los últimos cuatro años desde la asociación y desde la plataforma -de forma conjunta- se han realizado múltiples acciones para poner en el foco político la problemática del equipamiento y, por ende, del barrio. Por lo que destaca la presentación de dos mociones en el Pleno Municipal, la realización de tres asambleas, una concentración, un referéndum y hasta una recogida masiva de firmas [del distrito seis que engloba a cuatro barrios]. "Gracias a todo este esfuerzo, hemos visto los frutos", celebra el portavoz de la asociación, quien añade que "ha sido un proceso bastante intenso en el que han participado muchos vecinos, pequeño comercio del barrio". 

Así, y en nombre del barrio, expresa la "satisfacción" de que "el Gobierno Municipal haya entendido y priorizado las necesidades de los ciudadanos del sud y sobre todo de la gente mayor". 

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