Junts acusa a ERC de encallar la negociación de presupuestos en fiscalidad y 'procés'

Si de entrada parecía casi imposible que, nada más salir del Govern, Junts per Catalunya ayudara a su principal rival a aprobar los presupuestos, una vez se ha iniciado la negociación las diferencias han constatado la distancia sideral que separa a ambas posiciones. Fuentes de Junts detallan que existen nulos o mínimos avances en temas tanto fiscales, de infraestructuras y educativos así como de ayudas a empresas, por un lado, y también respecto a las ya clásicas discrepancias sobre el 'procés'. Esa es la versión pesimista de los de Jordi Turull, mientras fuentes de ERC sostienen que sí hay avances.

El miércoles estaba prevista una nueva sesión negociadora, pero la afectación por covid de uno de los negociadores anuló el encuentro, que tendrá lugar este jueves. Así las cosas, una vez ya prorrogadas las cuentas de 2022, como es preceptivo ante la llegada del nuevo año sin acuerdo, las diferencias persisten en todos los ámbitos.

En cuanto a los impuestos, Junts sigue reclamando medidas anti inflacionistas mediante una rebaja de tramos del IRPF y también del impuestos de sucesiones. Aducen los de Turull que existe ya un marco económico propicio para iniciar la rebaja de la carga fiscal debido a un aumento de la recaudación. También alegan que dejar de ingresar parte del iRPF no significaría menos ingresos hasta dentro de dos años.

Pero ERC se mantiene en lo acordado por ahora con los 'comuns': un ajuste técnico del impuesto de sucesiones subiendo los tramos para evitar que el impuestos a las grandes fortunas implantado por el Gobierno español suponga una merma de recaudación a la Generalitat. Esquerra se mantiene en lo afirmado por el 'president' Pere Aragonès: no es tiempo ni de rebaja de impuestos ni de tocarlos al alza.

Dos visiones sobre infraestructuras

Tampoco hay avances entre el Govern y Junts en reclamaciones de estos últimos como el polémico complejo Hard Rock en Tarragona, la ampliación del aeropuerto del Prat o la construcción de la llamada ronda viaria del Vallès. Para Junts se trata de proyectos "vitales" para el desarrollo futuro de Catalunya pero ERC se ha incluso movilizado en contra de alguna de ellas como la polémica propuesta de ampliación aeroportuaria.

La negociación tampoco avanza en cuanto a un fondo de ayudas a empresas que propone Junts a las empresas, valoradas en unos 150 millones de euros "negociables", según los posconvergentes, que ven en ERC "fobia a las empresas". Tampoco se acercan posiciones respecto a las ayudas que Junts pide para la escuela concertada. En ello la línea ideológica también separa a unos y otros, en especial si se recuerda que ERC ha cerrado un pacto con los 'comuns' que son el polo opuesto a esta reclamación en favor de la concertada.

El referéndum y el acuerdo de claridad

Junts también lamenta que ERC no acepte poner en práctica una resolución aprobada en el debate de política general sobre la necesidad de preparar una confrontación con el Estado. Los posconvergentes también afean a los republicanos que no se avance en la definición de un espacio estratégico entre partidos y entidades independentistas. Es una de las exigencias que llevó Junts a las negociaciones con ERC y que desembocaron en la salida de los de Turull del Govern alegando que Esquerra no cumplía con lo fijado en el pacto de gobierno. "Esquerra tiene su estrategia y quiere adhesión a la misma", se quejan fuentes de Junts. ERC como es conocido defiende, y así lo ha fijado en la ponencia de su congreso, el acuerdo de claridad para celebrar un referéndum vinculante y pactado con el Estado.

Las negociaciones se mantendrán entre ambos partidos en próximas fechas pero Junts se queja de que "ERC no pone fácil las cosas" y pronostica que el pacto que está más cerca es el de los republicanos con los socialistas catalanes, en virtud de la reciprocidad de apoyos en el Parlament y en el Congreso.

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