El tablero catalán

Junts, abierto a votar los presupuestos catalanes si se excluye al PSC

El partido de Turull y Borràs continúa negociando con el Govern sin demasiadas líneas rojas sobre el contenido

El secretario general de Junts, Jordi Turull, ofrece una rueda de prensa tras la reunión del Ejecutivo, el 3 de octubre de 2022, en Barcelona, Cataluña (España). El exvicepresidente del Govern Jordi Puigneró ha desvelado que Junts ha renunciado a su restitución en el último documento de negociación con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y ha acusado a ERC de no querer que estén en el Govern.

El secretario general de Junts, Jordi Turull, ofrece una rueda de prensa tras la reunión del Ejecutivo, el 3 de octubre de 2022, en Barcelona, Cataluña (España). El exvicepresidente del Govern Jordi Puigneró ha desvelado que Junts ha renunciado a su restitución en el último documento de negociación con el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y ha acusado a ERC de no querer que estén en el Govern. / David Zorrakino / Europa Press

Fidel Masreal

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Cuando en el primer año del Govern de ERC y Junts se planteó la posibilidad de acordar los presupuestos con los 'comuns', JxCat puso el grito en el cielo. Exigió intentar el acuerdo con la CUP e hizo responsable al 'president' Aragonès de cambiar de socio y romper la unidad independentista. Horas después asumió el nuevo escenario e incluso sacó pecho porque el 'conseller' de Economia era de Junts, era Jaume Giró. Ahora que el Govern es monocolor de ERC y ha llegado a un acuerdo con los 'comuns', en Junts no dan por cerrada la puerta a incorporarse al bloque del sí, como hace un año. Con una condición: que el PSC no esté.

Junts sigue negociando intensamente con el Govern. Solo en las últimas horas se han celebrado diversas reuniones. Entre las condiciones del partido de Jordi Turull y Laura Borràs existen planteamientos fiscales alejados de la visión más progresista de ERC y los 'comuns', pero no son una línea roja. De hecho no existen líneas rojas definitivas, pese a que este lunes el portavoz de Junts dejaba muy lejos la opción de un acuerdo y advertía de que las conversaciones iban lentas, en materias sectoriales como educación o energía.

Una decisión política

Pero la negociación presupuestaria es un juego más político que técnico, de contrapesos. Que los 'comuns' estén en el acuerdo no es un impedimento para Junts. Que esté el PSC, sí. Por eso es más en el terreno de juego del Govern donde se juega la posibilidad de que Junts pueda estar en el sí. Con todo, el juego político también tiene que ver con las distintas sensibilidades en el interior de Junts. Los hay en la formación de Turull que no quieren oír hablar de apoyar a ERC después de haber salido del Govern. "Sería estúpido que ahora apoyáramos a Aragonès después de que nos haya prácticamente echado", alegan. Otros creen que el partido no ha de perder la centralidad en su ADN político y la capacidad de diálogo. Esa es en definitiva una dicotomía interna propia de Junts.

El escenario sigue abierto. Las diferencias ideológicas en asuntos como las infraestructuras, la ampliación del aeropuerto o los impuestos siguen ahí, así como en el modelo de Junts de defensa de la escuela concertada, entre otras cuestiones. De ello se debate en diversas mesas sectoriales que trabajan discretamente. Pero, por ahora, a la espera del resultado, el escenario está abierto.

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