Salvador Illa reclama al Govern desencallar el cuarto cinturón y enfría el acuerdo por los presupuestos

El líder del PSC, Salvador Illa, ha enfriado la posibilidad de un acuerdo presupuestario en los próximos días con el Govern, que hasta ahora mantiene que ve "posible" que el acuerdo para las cuentas se cierre la semana que viene. Pero el dirigente socialista insiste en que que no se siente "responsable" del retraso en la aprobación de las cuentas porque lleva desde agosto ofreciendo un apoyo que, hasta ahora, había sido rechazado por el Govern. En una entrevista a EFE, Illa ha sumado una exigencia más para la negociación que resulta espinosa para el Executiu: desencallar la vía B-40 o cuarto cinturón en el Vallès. Es una reivindicación que se suma a la de desbloquear la inversión del macrocomplejo Hard Rock en Tarragona. Ambos proyectos son rechazados por los 'comuns', con quien el Govern mantiene la interlocución más avanzada.

El jefe de la oposición insiste en que se está todavía "al principio" de la negociación. Pese a la urgencia del Govern de cerrar un acuerdo ya y llevar las cuentas al Parlament antes de acabar el año, Illa ha dicho que él tiene "la conciencia muy tranquila" y ha avisado de que su partido quiere analizar los presupuestos a fondo y lograr "un buen acuerdo", para el que aún queda "camino por recorrer". "El PSC quiere hacer las cosas bien hechas y tardaremos lo que tardaremos. No siento ninguna responsabilidad por el calendario. El responsable se llama Pere Aragonès", ha subrayado.

El dirigente socialista ha reprochado al 'president' que primero no quisiera "saber nada" del PSC, que después dijera "que no pasaba nada si se prorrogaban presupuestos" y que ahora, "deprisa y corriendo" quiera aprobarlos. Los socialistas plantean "una negociación de tú a tú" en la que no se olvide "el peso parlamentario", ya que PSC y ERC tienen los mismos diputados. "Si alguien se pensaba que el PSC iría con una listita de un hospital aquí, una carretera allá, un campo de fútbol más allá... se equivoca", ha espetado. Aún así, ha insistido en que, por lo que dependa de él, Cataluña acabará teniendo nuevos presupuestos si no hay "más volantazos" de ERC.

En el marco de las seis reuniones sectoriales entre Govern y PSC, los socialistas han insistido en desbloquear proyectos como la ampliación del aeropuerto de Barcelona y el complejo del Hard Rock, a lo que ahora sumar también otra reclamación: el cuarto cinturón. El pasado junio, después de que trascendiera la baja cifra de ejecución de inversiones del Estado en Cataluña en 2021, la Generalitat plantó a la ministra de Transportes en un acto en el que se debía dar a conocer un acuerdo para desbloquear la construcción de la B-40, más conocida como cuarto cinturón o Ronda del Vallès, una vía que lleva años encallada y que provoca recelos en ERC.

Pero Illa considera que, al igual que con el Hard Rock, "no puede ser que el Govern bloquee" la B-40 por sus intereses "de chimenea estrecha y electoralista", en contra de "la voluntad muy mayoritaria de los responsables de instituciones de Sabadell y Terrassa y la sociedad civil" de esos territorios. Respecto al ámbito sanitario, se ha mostrado favorable a que haya un "avance importante" en esta materia y, como exministro de Sanidad, ha dicho que se siente personalmente "muy cerca" de los profesionales sanitarios, a falta de menos de dos meses para la huelga convocada en enero por los sindicatos de médicos catalanes.

Pero incluso en el caso de que se logre cerrar acuerdos presupuestarios, Illa ha puntualizado que su obligación será "tomar algunas precauciones de que se cumpla lo acordado". El dirigente ha recordado que Aragonès perdió el apoyo de CUP o JxCat por "no cumplir" sus pactos y que también los 'comuns' le han reprochado incumplimientos en compromisos presupuestarios; por ello, exigirá "garantías" de que lo acordado se lleva a cabo. "Ha de quedar por escrito. Generosidad, toda. Ingenuidades, no", avisa.