Álvarez se queda sin su candidato para dirigir la UGT de Catalunya

El liderazgo de la UGT de Catalunya está abierto. El líder del sindicato desde 1990, Josep Maria Álvarez, ha recibido la negativa "definitiva" de su candidato para dirigir la central sindical los próximos cuatro años, el dirigente de Seat Matías Carnero. Las presiones de Álvarez y de otros miembros de la cúpula del sindicato no han tenido efecto en Carnero, que se ha decantado por dar un paso atrás y seguir como presidente del comité intercentros de Seat y secretario general de UGT en la principal empresa industrial de Catalunya.

Carnero ha comunicado su rechazo a encabezar una candidatura oficialistacandidatura  para sustituir al secretario general durante los últimos 26 años después de varios meses de debate interno y de reflexión personal y con su equipo en Seat. "Soy una persona más de negociación y de industria que de un perfil institucional. Hay otros dirigentes en el sindicato mejor preparados para esa tarea", ha asegurado Carnero, que ha ofrecido su colaboración con el futuro secretario general. "Ahora hay que abrir el melón de candidatos para conseguir que haya una candidatura única", ha indicado Carnero.  

NEGOCIACIÓN DEL CONVENIO

Otro factor que ha pesado en la decisión del principal candidato ha sido su reciente reelección en febrero del 2015 como máximo dirigente de UGT en Seat y su temor a que su marcha de la empresa fuera mal vista por sus colegas del sindicato y la plantilla. Además, acaba de comenzar la negociación formal del próximo convenio colectivo de los 14.000 trabajadores de Seat mediante la constitución de la mesa, que se volverá a reunir a final de este mes. La petición sindical de aumento salarial choca ahora con los planes de ahorro de Seat y con el objetivo del grupo Volkswagen de reducir sus gastos para afrontar los costes derivados del escándalo por el trucaje de los motores diésel. 

Carnero accedió al secretariado de la UGT de Catalunya en el 2009 sin una cartera asignada y en el congreso del 2013 fue nombrado secretario general adjunto. Durante esos años ha intervenido en algunas negociaciones laborales complicadas y como apoyo de Álvarez.

La marcha atrás de Carnero deja vía libre a otros candidatos, cuando faltan tres meses para la celebración del congreso extraordinario, que hasta ahora se habían mantenido en un segundo plano a la expectativa de que el dirigente de Seat deshojara la margarita. Las quinielas apuntan como los mejor situados a Camil Ros, secretario de Política Sindical, y a Laura Pelay, secretaria de Estado del Bienestar y de Comuniación.

Para Carnero, más que las personas "lo más importante es el proyecto que presente cada candidato". El debate en Catalunya coincide con los movimientos para buscar un relevo a Cándido Méndez al frente de la ejecutiva confederal de la UGT, para la que Álvarez se perfila como uno de los aspirantes con más apoyos. La Federación del Metal de UGT ya ha mostrado en público su respaldo al dirigente catalán.