Álvarez inicia el camino para su relevo en la UGT en abril del 2016

La UGT de Catalunya ha iniciado oficialmente el camino hacia su renovación en el fondo y en las caras. El secretario general del sindicato, Josep Maria Álvarez, anunció ayer ante el Comité Nacional su renuncia a partir de abril del año que viene al no presentarse a la reelección después de 25 años en el cargo. El Comité Nacional del sindicato acordó convocar el próximo congreso del 6 al 8 de abril del 2016, un año antes de lo previsto, con el fin de renovar la dirección y la estructura de la organización.

«Mi tiempo como secretario general acabará en el congreso que celebraremos en abril», manifestó Álvarez, que mostró su intención de mantenerse al margen del proceso de elección de la nueva dirección. A su juicio, el sindicato cuenta con «personas muy válidas» para encabezar la organización y asumir los retos de los próximos años.

Después de varios amagos de retirada en los congresos anteriores, el máximo dirigente del sindicato catalán, que se acaba de prejubilar en la empresa Alstom, afirma que esta vez no hay vuelta atrás. Desde que se impuso en una convulsa sucesión a Justo Domínguez en 1990, Álvarez se ha ido convirtiendo en un veterano de los agentes sociales, aunque no en el decano, puesto que ocupa Josep González, que preside Pimec desde 1997 y la antigua patronal Sefes desde la dácada de los 80.

La organización sindical espera desde hace meses la respuesta del líder de UGT en Seat, Matías Carnero, a la propuesta de tomar el relevo de Álvarez en el sindicato. Los últimos movimientos en la cúpula del sindicato han ido encaminados hacia ese objetivo con el nombramiento de Carnero como secretario general adjunto y su aparición en público como número dos de la central siempre al lado de Álvarez.

En la dirección que saldrá elegida en abril estarán presentes los secretarios generales de las nuevas tres federaciones, una de industria y otras dos de servicios privados y públicos, en las que se fusionarán las seis que existen ahora.

Aunque Josep Maria Álvarez asegura que necesita «un tiempo» para pensar qué hará en el futuro, descarta su fichaje en las listas de algún partido político, pero se muestra más cauto sobre su participación en el sindicato. No en vano, Álvarez aparece en las quinielas como uno de los candidatos para suceder a Cándido Méndez al frente de UGT en toda España.