"El piropo ha dejado de ser bonito y gracioso"

El piropo era una costumbre muy común en nuestra querida España en blanco y negro. Apoyada por la televisión, el cine, la convertía en algo divertido, romántico, gracioso. Cómo iba a ser de otra manera, si estábamos educados, inmersos en una cultura machista.

Hoy en día, gracias al avance social y cultural, las cosas han cambiado y lo que antes era correcto hoy ya no lo es. Hoy en día, el piropo podría decirse que es una ridiculez, pero es mucho más, es una agresión hacia la mujer.

Ningún hombre tiene que darle su opinión a una mujer sobre su físico, su forma de vestir, sus maneras. Porque un piropo es una opinión dada sin que la mujer la pida. Un piropo parece una tontería, una cosa graciosa, pero es un primer paso para construir un relato en el que la mujer es un mero objeto, y cuando alguien es un objeto puede ser utilizado al gusto del consumidor.

Ya son muchas las mujeres muertas por manos machistas. Ya empieza a ser normal que los chicos adolescentes traten a las chicas como objetos, de usar y tirar. El machismo nos trae muchas historias tristes, y es posible que algunas comenzaran con un "bonito piropo".