Política municipal

Obra pública desierta en Barcelona: desde vías de metro hasta pisos-contenedor

Centenares de contratos no se han podido adjudicar por la incertidumbre internacional sobre el precio y la disponibilidad de los materiales

Retraso en las obras del nuevo museo Martorell y el acceso lateral a la Ciutadella por la crisis mundial de suministros

Alud de licitaciones de obra pública desiertas en Catalunya por el incremento del coste de materiales

Aumento de los precios y falta de suministros. ¿Cómo afecta a la construcción?

Recreación virtual de la promoción APROP de pisos de emergencia hechos con contenedores reciclados en la Bordeta (Barcelona)

Recreación virtual de la promoción APROP de pisos de emergencia hechos con contenedores reciclados en la Bordeta (Barcelona) / Ayuntamiento de Barcelona

Jordi Rovira

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La crisis mundial de suministros ha hecho mella en la obra pública de Barcelona: los concursos desiertos han frustrado numerosos proyectos el último año. La inflación y la escasez de materiales, fruto de la pandemia y de la guerra de Ucrania, ha provocado que muchas empresas no se atrevan a presentar ofertas por miedo a pérdidas imprevisibles por la volatilidad en la materia prima. Dos ejemplos recientes y dispares en la capital catalana son la renovación de un tramo de vías de la L3 del metro y un bloque de alojamientos de emergencia hecho con contenedores marítimos en el barrio de la Bordeta.

En mayo, el Informe de Licitación de la Cambra de Contractistes d'Obres de Catalunya aseguraba que entre 2021 y el primer trimestre de 2023 se han dado 738 obras desiertas por un importe que asciende a los 220 millones de euros. “Es insólito. Para encontrar una situación similar tendríamos que remontarnos a la crisis del petróleo de 1973”, admite Josep Gassiot, presidente de la Confederació Catalana de la Construcció.

“Es un tema preocupante”, reconoce Oriol Güell, presidente de Infraestructures.cat, empresa pública encargada del proceso de ejecución de las obras de la Generalitat de Catalunya. “Esta situación no solo afecta a la construcción, sino también a sectores que dependen de la obra pública, como el saneamiento urbano o la limpieza”, advierte Carlos del Barrio, secretario de Acción Sindical de la Federación de Hábitat de Comisiones Obreras.

Rigidez de la ley estatal

El problema radica en la Ley de Contratos del sector público, que no permite la revisión de precios mientras dure la obra, lo que no fue un problema hasta la pandemia. El paradigma ha cambiado. Antes la inflación no superaba el 1% y ahora estamos entre un 4 y un 7%”, explica Güell. “Los precios no van acorde con el coste”, afirma Del Barrio.

“Barcelona y su área de influencia es donde se concentra más obra sin ejecutar”, asegura Gassiot. Los datos del primer trimestre de este año dejan claro este fenómeno y también el peso de la inversión en infraestructuras metropolitanas. La capital catalana es, con un presupuesto de 444 millones de euros –un 71% del total en Catalunya– la provincia con más licitaciones, lo que explica que concentre el mayor número de concursos desiertos.

Nuevas vías para la L3

Otro dato a tener en cuenta: de los seis principales concursos desiertos que la Cambra de Contractistes destaca en su informe, cuatro se localizan en el área metropolitana. El más reciente el concurso declarado desierto este abril para renovar la vía del tramo de L3 del metro entre las estaciones de Sants y Espanya, que han llegado al final de su vida útil. Con un presupuesto de 7 millones de euros, preveía que los trabajos empezaran este mismo año –tienen un plazo de 8 meses– en horario nocturno –de 01h a 04:15h– para no afectar el servicio.

Andén de la estación Sants Estació de la L3 del metro de Barcelona, en una fotografía de archivo

Andén de la estación Sants Estació de la L3 del metro de Barcelona, en una fotografía de archivo / Ricard Cugat

Sin contenedores para los APROP

tercera promoción de pisos-contenedorAPROPcomo estaba previsto

El Institut Municipal de l’Habitatge i Rehabilitació de Barcelona recibió una sola oferta a la licitación publicada y, cuando estaba a punto de adjudicar, la empresa (Calaf Grup) manifestó que los principales proveedores no garantizaban la disponibilidad de los 80 contenedores marítimos necesarios a causa de una “rotura de stock”: “En los mercados internacionales se ha constatado una falta generalizada” de este elemento. Dada la estructura de este tipo de inmuebles provisionales, los 80 contenedores deben ser idénticos, un lote garantizado antes de empezar la obra. 

Recreación virtual de uno de los pisos de la promoción APROP de la Bordeta, hecha con contenedores reciclados

Recreación virtual de uno de los pisos de la promoción APROP de la Bordeta, hecha con contenedores reciclados / Ayuntamiento de Barcelona

Cambiar la ley

licitaciones desiertas

Oriol Güell admite que en mayo, cuando la Cambra de Contractistes presentó su informe, ya les llamó la atención el gran número de concursos desiertos. “Las cifras nos sorprendieron. No teníamos la percepción que la situación fuera tan grave”, reconoce. Analizaron sus datos y vieron que de los 738 concursos desiertos, solo 23 eran de Infraestructures.cat. “Y gracias a un banco de precios dinámico que tenemos, algunas de estas obras las volvimos a licitar y casi todas las tiramos adelante con un precio justo”, celebra.

Pero las revisiones de precios previas al inicio de las obras tienen un coste para la Administración. “Si cuestan más dinero, se harán menos cosas. Quizás en lugar de diez escuelas, se harán nueve”, afirma Güell, que tiene claro que se debe hacer algo al respecto pero advierte que no será fácil. “Por parte de la patronal tampoco hay una propuesta clara de cómo solucionarlo”, lamenta.

Los sindicatos y la patronal piden la revisión de la ley, aunque no hay movimientos en este sentido. Gassiot es crítico con las administraciones porque, asegura, dan largas a esta opción. En cambio, tiene buenas palabras para las revisiones de precios de BIMSA, la empresa pública que gestiona grandes obras del Ayuntamiento de Barcelona, por ejemplo la plaza de las Glòries el tranvía por la Diagonal. O de la rehabilitación del Museu Martorell, que como adelantó este diario también salta a otoño a causa de la crisis mundial de suministros. Por su parte, los sindicatos prometen fiscalizar las revisiones de precios: “No aceptaremos que sirvan para mejorar los resultados empresariales sin aumento de salarios”, advierte del Barrio.

Obras en el museo Martorell, que será una nueva puerta del parque de la Ciutadella

Obras en el museo Martorell, que será una nueva puerta del parque de la Ciutadella / Ferran Nadeu

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