Perlas del papel

La España normal, una y grande

La derecha despotrica del uso del catalán, el euskera y el gallego en el Senado

La España normal, una y grande_MEDIA_1

La España normal, una y grande_MEDIA_1

XAVIER CAMPRECIÓS

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Impepinable. La derecha política y la mediática españolas andaban enrabietadas porque el Senado ha dado, 33 años después, un tercer y tímido paso como Cámara de representación territorial de la España de las autonomías al aprobar el uso, oral y limitado, del catalán, el euskera y el gallego en los plenos. «Esto, en un país normal, no se produce», sentenció el líder de la oposición,Mariano Rajoy,amparando la decisión del PP que preside de emplear solo el castellano. Y dado que el diccionario de la RAE defineanormal como aquello «que accidentalmente se halla fuera de su natural estado o de las condiciones que le son inherentes»,convendremos que no hay nada de qué hablar: viva la España una y grande, aunque no sea la que consagra la Constitución aún vigente.

En la misma onda andaba la prensa madrileña afín al PP, para la que el pequeño paso del Senado constituye un contratiempo en su campaña para recastellanizar todos los rincones de España, combatiendo la normalización de las lenguas propias de Catalunya, Euskadi y Galicia.

Senadores que hablan español en el pasillo montan una Babel en el pleno, titulaba El Mundo, apoyándolo con el editorialEspañoles que usan intérpretes para entenderse.optaba porDerroche autonómico. Senadores españoles en Babel.por El Senado, una Torre de Babel con pinganillos, sumándole el editorialEsperpento en el Senado.titulaba:El Senado estrena un multilingüismo que nos cuesta más de 350.000 euros al año.

Abc

La Razón,

Y La Gaceta

El gasto en época de crisis es la gran baza material de los críticos con el uso del catalán, el euskera y el gallego en el Senado. A eso opusoPúblico el martes que esa cifra no suponía ni el 1% del presupuesto de la Cámara. Otros muchos oponían ayer que ese debe ser considerado un gasto corriente en un Estado plurilingüe:«Quizá sea más práctico y barato usar solo el castellano-se leía enEl acento editorial deEl País-,pero abrir las puertas del Senado a las lenguas cooficiales es la aceptación de una realidad social y de la riqueza cultural y lingüística de España». Y no pocos -los diarios de Catalunya, Euskadi y Galicia saludaban el avance del Senado- iban más allá.«Desconfiaré siempre de quien no respete mi lengua»,escribíaCarles Capdevila(Ara). Pues eso.

¿Usted vive en un país normal o anormal?