Los supermercados amplían su oferta de platos listos para comer para no cocinar en casa

Arroces (de pescado, vegetarianos o con costilla de cerdo), ensaladas y ensaladillas, tortillas, croquetas y los emergentes sushis, kebabs y fideos tipo ramen. Los platos preparados, que cada año crecen en cuota de mercado en España, han recibido un impulso significativo desde que se disparó la inflación de los alimentos. "El producto fresco es más caro que el envasado, y este, además, ahorra en tiempo y en costes de energía... Y, de paso, genera menos desperdicio alimentario en los hogares", observa Pietro Tonini, investigador del Institut de Ciència i Tecnologia Ambiental de la Universitat Autònoma de Barcelona (ICTA-UAB). El fenómeno de los platos preparados está ya tan consolidado que casi la mitad de los españoles los consumen al menos una vez a la semana, sobre todo en el hogar, pero también en el trabajo. Es un sector en alza, con un crecimiento en 2023 del 2,9%, según los datos facilitados por la Asociación Española de Fabricantes de Platos Preparados (Aseprafe), aunque hay otros estudios, como el presentado la semana pasada por la consultora Kantar, que elevan el aumento al 11%.

El consumo en casa de platos preparados creció otro 3% en 2023

Pero lo último en este terreno va incluso un paso más allá. Es el denominado 'ready to eat' o 'listo para comer', comida preparada, más elaborada en muchos casos, y ya caliente, con la posibilidad incluso de disponer en el mismo supermercado de cubiertos, suministradores de bebidas y un espacio donde comérselo. Es una alternativa cada vez más aceptada por aquellos que no quieren (o no pueden) cocinar en casa, aunque la mayoría la consumen luego en sus hogares, según una encuesta elaborada por Appinio para Alimarket Gran Consumo.

Medio centenar de establecimientos en toda España, de los que casi la mitad fueron de Mercadona, estrenaron en 2023 un servicio de estas características. La compañía valenciana cuenta en estos momentos "con 1.110 tiendas entre España y Portugal con esta sección, sobre el total de 1.681 locales que tiene la cadena", indican fuentes de la empresa. En estos momentos, hay en torno a 2.000 establecimientos de distintas firmas que ofrecen el 'ready to eat', en distintos formatos, lo que supone que alrededor del 8% de los 25.200 establecimientos que hay en España se han sumado a esta tendencia.

El auge de los platos preparados amenaza la dieta mediterránea

Dentro de este paquete se incluyen, por ejemplo, los asadores de pollo de la cadena DIA o los cocederos de mariscos de algunos BonPreu o Spar. El concepto de Mercadona, sin embargo, dispone de una oferta más variada, "desde el cuarto de pollo con patatas hasta los arroces, las croquetas, los canelones y lasañas y las tortillas de patatas... O los platos específicos que se incorporan en momentos concretos del año, como Navidad, y que van desde el muslo de pollo relleno hasta la ensaladilla de marisco", detalla una portavoz de la compañía. También Carrefour, aunque no con el mismo alcance, tiene una fórmula similar en varios de sus establecimientos, entre ellos el gran almacén de Gran Via 2, en Barcelona.

Con cocina o sin cocina

"La idea, que se puso en marcha en 2018 -prosigue la misma fuente de Mercadona-, se adoptó después de escuchar al cliente. La gente comentaba al pasar por caja lo bueno que sería tener platos algo más elaborados, listos para comer, y la empresa tomó nota". En 2023, la empresa introdujo nuevas propuestas, unas albóndigas guisadas con patatas y unos espaguetis a la carbonara, "que se crearon a partir del proyecto de coinnovación que tiene la compañía en 24 centros, donde se realizan reuniones, charlas e intercambios con los clientes". Eso sí, a diferencia de los asadores y los cocederos de otras firmas, en la sección 'Listo para Comer' de Mercadona, "no hay cocinas". Es la empresa proveedora de cada plato la que se encarga de la elaboración y cocción. En el supermercado, se mantienen calientes en unas vitrinas especiales y si el comprador quiere calentárselo más dispone de unos microondas a la salida para hacerlo.

Sí tiene cocina (y a la vista de los clientes, por cierto) El Corte Inglés, que en algunos establecimientos de la Comunidad de Madrid, Andalucía, Canarias y Comunidad Valenciana ha habilitado un gran espacio gastronómico, el Gourmet Experience, en el que el 70% de los platos se elaboran en las propias instalaciones del establecimiento, a la vista de los clientes. "Nuestra oferta cuenta con más de 150 referencias activas y llevamos más de 10 años creciendo a doble dígito", explican fuentes de la compañía, que agregan que "este año va a abrir un nuevo negocio de platos de última generación" en la tienda de la plaza de Francesc Macià, en Barcelona. Solo por el espacio que tiene en la calle de Preciados de Madrid, pasan cada día unas 800 personas, con un gasto medio de unos 13,5 euros.

Los que se desmarcan

No han entrado todavía en esta propuesta del 'ready to eat' dos de los grandes, los alemanes Aldi y Lidl, que se resisten a dar el paso a la comida caliente y se quedan solo con la refrigerada. Las dos compañías, junto con la cooperativa Consum, son las únicas tres distribuidoras del 'top ten' español que no disponen de platos calientes y apuestan solo por lo frío. Y eso que el negocio, asegura la asociación Aseprafe, va en aumento. Durante todo el año pasado, cada persona consumió en su hogar un total de 16,3 kilos de comida preparada fuera de casa, según datos de la entidad, que subraya el esfuerzo que está haciendo el sector para que estos platos sean cada vez más saludables y sostenibles.

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Más a nivel catalán, BonPreu estrenó en 2022 en uno de sus hipermercados Esclat de Terrassa un espacio denominado Bonprofit, con más de 30 platos "para llevar y consumir", que supuso un primer paso en la ampliación de sus cocederos de pescado y marisco, presentes en otros establecimientos de su red comercial. Bonprofit está disponible actualmente en cuatro Esclat más de Girona y de Lleida. También en Lleida, la cadena local Plusfresc cuenta con un espacio bautizado como KOR Mercaurant, en un espacio tipo rostisería en el que ofrece también platos calientes listos para consumir.

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