Educación

Barcelona climatizará sus 170 escuelas antes de 2030 con fondos del impuesto turístico

El Plan Clima Escola, con una inversión de 100 millones, ha realizado un estudio térmico para priorizar los centros

Catalunya introducirá el curso que viene un programa para mejorar las matemáticas y la comprensión lectora

Protesta de alumnado y familias para pedir la climatización de las aulas, el pasado mes de mayo en Barcelona.

Protesta de alumnado y familias para pedir la climatización de las aulas, el pasado mes de mayo en Barcelona. / Manu Mitru

Helena López

Helena López

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Uno de los principales problemas con los que se encuentra la ciudadanía para intentar resolver prácticamente cualquier asunto es el grotesco espectáculo de las administraciones pasándose el balón las unas a las otras. El clásico "tiene usted razón, pero se escapa de nuestras competencias". La falta de climatización escolar en la escuela catalana es un ejemplo claro de ello. El sistema educativo –el contenido de la escuela– es responsabilidad de la Conselleria d'Educació, es decir, de la Generalitat. Sin embargo, los edificios y su mantenimiento –el continente–, depende. Los institutos –los centros de secundaria– dependen también del Departament, pero las escuelas de primaria son competencia de los ayuntamientos.

En ese contexto, el Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha el Plan Clima Escola Barcelona, que dispone de un presupuesto de 100 millones de euros –provenientes de la recaudación del impuesto turístico– para la climatización de un total de 170 centros educativos de su competencia. Es decir, 149 escuelas de primaria, dos de educación especial, tres institutos municipales y 16 institutos escuela. El resto de institutos –la gran mayoría– quedan fuera al no ser su mantenimiento y reforma competencia municipal.

Las obras, que empezarán este verano, se realizará en dos fases de tres años, con 84 centros entre 2024 y 2026, y 86 entre 2027 y 2029

Es decir, el plan prevé la climatización completa –de todo el edificio– de los 170 centros que competen al ayuntamiento en los próximos seis años. Se hará en dos fases de tres años, con 84 centros entre 2024 y 2026, y 86 entre 2027 y 2029. La iniciativa empezará este verano con los primeros 24 centros, explica Antoni Garcia Salanova, director de equipamientos educativos del Consorci d'Educació de Barcelona, quien apunta que se ha realizado un mapeo térmico para priorizar las escuelas, al tiempo que subraya que las intervenciones planteadas en los centros implicarán la incorporación de nuevas tecnologías y la instalación de placas fotovoltaicas, pero también "las reformas necesarias para evitar el despilfarro de las energías producidas".

Un plan, el de Barcelona, aplaudido por Affac, la federación de asociaciones de familias de alumnos, que exige al Departament otro en la misma línea para el conjunto del territorio catalán, sobre todo para no olvidar los institutos, competencia 100% de la conselleria.

Gestión del "mientras tanto"

Pese a la unanimidad en que el modelo del Plan Clima Escola Barcelona es el camino a seguir –ya que abarca la totalidad de los centros y no consiste en instalar aparatos de aire acondicionado, con la evidente huella ecológica que eso genera, sino de transformar los edificios para hacerlos más eficientes energéticamente, a muchas familias de la capital catalana les preocupa la gestión del "mientras tanto", sobre todo en los centros cuya actuación no está prevista hasta la última fase del plan: un lustro. "Nuestros hijos están en el colegio hoy, mañana y el año que viene, no pueden esperar cinco años", afirman desde las afa afectadas.

Una de las escuelas movilizadas por esta cuestión es la Escola Pràctiques, en el distrito de Sants-Montjuïc, centro que accederá al Plan Clima en 2027. "Con las obras en la estación de Sants, justo delante del colegio, no podremos abrir las ventanas, y esto no solo nos afecta a nosotros, también a la Jaume I: vamos de la mano en esta reivindicación", explica Marta Fernández, miembro del afa del centro, entidad que, adelantándose a este problema – "en el centro hay varios niños con asma y no pueden estar expuestos al polvo constante de unas obras de la envergadura de las de la estación de Sants"–, hizo un presupuesto para instalar dos ventiladores de techo en cada aula.

"Planteamos una prueba primero en tres clases, pagando afa y escuela al 50%, pero estamos pendientes de que nos dejen hacerlo, porque sabemos de centros en los que las familias han tomado la iniciativa por su cuenta y después el Departament las ha hecho volver atrás, cuando estamos hablando de mucho dinero", expone Fernández, quien apunta a que han llegado a 30ºC en las clases. Fuentes del Consorcio aseguran que el centro tiene el visto bueno "desde hace tiempo", aunque en el afa –insiste Fernández– desconocía la información (un clásico).

Eduardo Muñoz, miembro del afa de la Escola Miralletes, en el distrito de Sant Martí, apunta también a ese "mientras tanto". "¿Qué pasa con las escuelas del último grupo en las que no se actuará hasta 2029?", se pregunta.

Suscríbete para seguir leyendo