NUEVO COMUNICADO DE LA FAMILIA

Bianchi seguirá hospitalizado en Japón

El piloto francés sigue "crítico pero estable" casi un mes después del accidente en el circuito de Suzuka

El piloto francés Jules Bianchi, el pasado mayo, en Mónaco

El piloto francés Jules Bianchi, el pasado mayo, en Mónaco / periodico

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El próximo miércoles se cumple un mes del grave accidente de Jules Bianchi en el circuito de Suzuka, mientras se disputaba el GP de Japón de F-1, pero el piloto francés "sigue luchando por su vida".  Este jueves, la familia ha hecho público un comunicado a través de la escudería Marussia en el que explica que, de momento, el joven no será trasladado.

"Aunque ha habido algunos informes que hablaban de nuevos planes de tratamiento para Jules, su lucha continuará aquí. Los estamos afrontando paso a paso", añade la nota. Bianchi, que sufre una de las lesiones encefálicas más graves, se encuentra ingresado desde el día del accidente en el Centro Médico General de la prefectura de Mie, en Yokkaichi. Allí fue operado y allí se encuentra "en estado crítico pero estable, según los informes de los profesionales que lo tratan".

Seguidores pendientes en todo el mundo

Sus allegados reconocen que no tiene información nueva que ofrecer, pero entienden que "hay mucha gente en todo el mundo que está pendiente de Jules y que desea que gane esta batalla". "Les debemos a sus seguidores el reconocimiento por sus mensajes de ánimo y alguna novedad sobre su estado aunque sea tan escueta", argumentan.

Para acabar, subrayan que el piloto "está recibiendo el mejor tratamiento posible" y que los médicos de Yokkaichi "están en constante contacto con los neurocirujanos de la Universidad La Sapienza de Roma y el profesor Gerard Saillant, presidente de la Comisión Médica de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA)"

El pasado 5 de octubre, Bianchi perdió el control de su monoplaza en la curva 7 del circuito japonés y chocó a a 219 km/h. con el tractor-grúa que en ese momento estaba retirando el Sauber del alemán Adrian Sutil, que apenas un minuto antes se había salido de la pista por la intensa lluvia. El impacto fue tan brutal, que el coche levantó el remolque del suelo medio metro.