No es magia

Los expertos dan la explicación definitiva de por qué desaparecen los calcetines en la lavadora

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Un calcetín dentro de una lavadora

Un calcetín dentro de una lavadora / iStock

Alexandra Costa

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¿Quién no ha echado de menos un calcetín después de ponerlo en la lavadora? Seguro que, además, te ha pasado varias veces. Quizás no tantas como cuantificó un estudio realizado por Samsung en 2017, que estableció que una persona pierde de media 15 calcetines al año y, a lo largo de toda su vida, la friolera de 1.264, pero seguro que acumulas bastantes parejas perdidas.

El físico británico Robert Matthews dio la explicación definitiva de por qué desaparecen los calcetines en la lavadora: por culpa de la Ley de Murphy. Vaya, confirmó que si algo puede salir mal, saldrá mal. La cuestión es que eso sucede muy a menudo en el asunto que nos compete. Es más, si la razón se reduce a un principio empírico, la lavadora bien podría ser un fenómono de la física cuántica: un agujero negro que se traga calcetines por doquier.

Como es simple redundar en la Ley de Murphy, el experto argumentó su conclusión. Matthews sugirió que la desaparición de los calcetines sigue un patrón probabilístico. "La pérdida aleatoria de estas prendas siempre es más probable que cree el número máximo posible de calcetines impares", indicó en un artículo publicado en la revista 'Scientific American'. Es decir, cuando un calcetín se pierde, su pareja queda suelta y es menos probable que se use. Por tanto, esta situación aumenta la probabilidad de que otro calcetín con pareja desaparezca en el próximo lavado.

No es magia, sino probabilidad

Algo parecido dijo el estadístico estadounidense Victor Niederhoffer en otro artículo, este publicado en el diario 'Daily Speculation': "Si tienes 20 calcetines, en concreto de 10 pares diferentes, sucede lo siguiente después de perder una primera prenda: la posibilidad de que el segundo deshaga otro par son de 18 sobre 19, frente a una contra 19 de que sea un calcetín del mismo par".

Niederhoffer trata el asunto como Matthews, como una cuestión de probablidad, y lanzó un experimento: dejar de comprar calcetines durante un tiempo y luego comprar si hay desparejados que con pareja. ¿Te animas a hacerlo o prefieres seguir pensando que la lavadora es un portal mágico en el que los calcetines van a un lugar mejor?

Las teorías de ambos expertos no son nuevas, las publicaron en 1997 y 2006, respectivamente. Así que llevamos desparejando calcetines porque queremos desde hace mucho o porque, simplemente, nos gusta celebrar el Día Mundial del Calcetín Perdido, que tiene lugar cada 9 de mayo.