Idea polémica

La ACA planteó al Govern al menos en tres ocasiones trasladar agua del Ebro a Barcelona

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El director de la ACA, Samuel Reyes, junto al conseller de Acció Climàtica, David Mascort, durante una de las reuniones de las últimas semanas.

El director de la ACA, Samuel Reyes, junto al conseller de Acció Climàtica, David Mascort, durante una de las reuniones de las últimas semanas. / MARIA ALADERN / ACN

Guillem Costa

Guillem Costa

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El director de la Agència Catalana de l'Aigua (ACA), Samuel Reyes le propuso al Govern al menos en tres ocasiones trasladar agua del Ebro hasta Barcelona. Según ha podido saber en exclusiva EL PERIÓDICO, Reyes lo planteó durante algunas de las reuniones de la Comisión Interdepartamental de la Sequía, donde coinciden el president, consellers y cargos como el director de la ACA u otros directores generales. Reyes pensó que se debía considerar la conexión de la red del CAT (Consorci d'Aigües de Tarragona) con la red de ATL (la empresa pública Ens d'Abastament d'Aigua Ter Llobregat).

La Agència Catalana de l'Aigua cuantificó el coste de esta opción en 200 millones y sugirió al Govern considerarla, pero este la ha rechazado 

El director de la agencia destacó que esta opción es la actuación de emergencia que puede aportar un caudal más importante y cuantificó su coste: 200 millones de euros. Reyes, en tres de estas reuniones de alto nivel, donde se decide cómo gestionar la sequía en Catalunya, expuso esta posibilidad técnica y aseguró que la infraestructura, si se decidía optar por esta medida, podía estar lista en 2025, puesto que se podía construir en un año y dos meses.

Samuel Reyes advirtió que el gran riesgo de este medida era el rechazo social que podía generar

En total, se calculó que mediante esta conexión se podían transferir a la región metropolitana 45 hm3 al año. Esta cantidad es algo superior al volumen almacenado a día de hoy en el embalse de Susqueda. Reyes, sin embargo, advirtió de que el gran riesgo asociado a esta medida era el rechazo social que podía generar en Catalunya. Aun así, dentro de las distintas alternativas planteadas, el director de la ACA resaltó esta opción.

Conexión reversible

En todo momento se sostuvo que la conducción fuese reversible, es decir, que sirviera de utilidad para enviar agua de norte a sur y de sur a norte. Una posibilidad que no comparte el presidente del Consorci d'Aigües de Tarragona, Joan Alginet: "Jamás bajaría agua de norte a sur. En Barcelona no hay excedente".

Según ha comprobado este diario, Reyes se refirió varias veces a una serie de medidas a emplear para luchar contra la actual crisis hídrica. En esta lista, donde se recogían las dos desalinizadoras, dos nuevas potabilizadoras en el Besòs, los barcos, la reducción de los caudales ambientales o las subvenciones para recuperar pozos, por poner algunos ejemplos, también estaba el traslado del agua del Ebro hasta Barcelona mediante una cañería.

La obligación de la ACA, ante un escenario de escasez como este, es buscar soluciones técnicas y eficaces. En este contexto, Reyes les sugirió a los miembros del Govern que se plantearan seriamente la posibilidad de conectar el CAT con ATL, recuperando un plan de cañería que ya se puso sobre la mesa a principios de siglo, con un recorrido que une Constantí y Olèrdola.

'No' del Govern

Después de las explicaciones del director de la ACA, la Comisión Interdepartamental de la Sequía debatió esta propuesta, pero decidió no adoptarla. De hecho, durante los últimos meses, tanto el president, Pere Aragonès, como el conseller de Acció Climàtica, David Mascort, han rechazado tajantemente traer agua del Ebro a Barcelona, pese a las presiones de ciertos sectores que han puesto de nuevo este proyecto en la agenda. Mascort incluso se reunió con el colegio de ingenieros, uno de los colectivos que abandera esta infraestructura, y les explicó que sus planes no pasaban por este traslado de agua, sino por potabilizar y regenerar agua en el Besòs, además de impulsar las dos nuevas desalinizadoras (la de la Tordera y la del Foix).

Tanto Aragonès como Mascort han rechazado tajantemente traer agua del Ebro a Barcelona

¿Y qué ocurrirá si mientras estos y otros proyectos están en marcha, sigue sin llover? Antes que ir a buscar agua del Ebro a través de una tubería fija, se recurrirá a la opción, puntual y de emergencia, de los buques cisterna. A día de hoy, en la mitad de Catalunya que forma parte de las cuencas del Ebro, y por lo tanto, también en Tarragona, la sensación de sequía es casi imperceptible (el ámbito del CAT está en fase de 'prealerta'). Los embalses del Ebro disponen de reservas, lo que genera una situación de contraste absoluto entre Tarragona (que se abastece con el minitrasvase del Ebro) y el resto de las cuencas internas.

No obstante, por ahora, el Govern reduce la solidaridad entre diferentes zonas a una sola opción: el posible traslado de agua en barcos, que además de Sagunt, podrían llegar a cargar también en Tarragona. La opción técnica más controvertida, trasladar agua del Ebro hasta el área metropolitana de Barcelona, sí ha estado sobre la mesa del Govern en los últimos meses. Pero la decisión política del Ejecutivo catalán, después de estudiarlo, es contundente: no se abrirá ese cajón.

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