Crisis hídrica

Moncloa y Generalitat abordan hoy cómo costear el traslado de agua en barcos

El Govern ve "insostenible" el precio de los barcos y confía en que el ministerio aporte fondos para afrontar esta "medida extrema"

La ACA estudia cómo racionar el agua entregada en los depósitos municipales

BARCELONA 21/05/08 LLEGADA DEL BUQUE NORIENT SOLAR PROCEDENTE DE MARSELLA Y CARGADO DE AGUA POTABLE FOTO ALBERT BERTRAN

BARCELONA 21/05/08 LLEGADA DEL BUQUE NORIENT SOLAR PROCEDENTE DE MARSELLA Y CARGADO DE AGUA POTABLE FOTO ALBERT BERTRAN / ALBERT BERTRAN

Guillem Costa

Guillem Costa

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Trasladar agua en barcos a Barcelona es una última medida que se pretende evitar a toda costa. Sin embargo, el Govern, el puerto de Barcelona y la empresa Aigües de Barcelona se están preparando para tener el operativo listo en caso de que se decida que ejecutar esta solución. ¿Quién pagará esta agua, a precio de oro? Esta es una de las cuestiones abordarán hoy la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, y el conseller de Acció Climàtica, David Mascort. El encuentro entre Moncloa y Generalitat tendrá lugar en Barcelona, en la sede de la conselleria, a las 10.30 horas y una de las cuestiones que estará sobre la mesa es la posibilidad de que la capital catalana reciba agua procedente de la desalinizadora de Sagunto, una infraestructura que gestiona el ministerio a través de la empresa pública Acuamed.

Está previsto que Ribera y Mascort hablen de otros asuntos relacionados con la sequía, después de que el Gobierno haya reiterado su disposición a ayudar a Catalunya a afrontar esta crisis hídrica. La última reunión oficial entre ambos dirigentes fue telemática, en noviembre. No obstante, desde entonces, la relación entre las respectivas administraciones ha sido fluida, por lo que se espera que del encuentro de hoy pueda salir algún acuerdo en firme.

"Los barcos vendrán cuando los servicios hídricos esenciales estén en riesgo"

— Anna Barnadas, secretaria de Acció Climàtica

En las últimas semanas, Ribera ya se abrió a sufragar el coste de los buques cargados de agua potable. Por esta razón, el ejecutivo catalán confía en que estas declaraciones se conviertan en un compromiso definitivo. La secretaria de Acció Climàtica, Anna Barnadas, en conversación con EL PERIÓDICO, recuerda que las embarcaciones cisterna son sinónimo de emergencia extrema: "Los barcos vendrán cuando los servicios esenciales estén en riesgo".

Barnadas se decanta por sacar rédito de todas las acciones posibles, antes recurrir a los barcos, puesto que el coste de transportar el agua por mar es muy elevado: "El precio de traer agua en barco es insostenible y solo es justificable en caso de que el recurso se esté agotando". "Es la solución de emergencia para cuando el resto hayan fracasado", añade Barnadas. Los barcos, que podrían llegar a suministrar, como máximo, 30.000 metros cúbicos por segundo, podrían trasladar agua procedente de cualquier punto del Mediterráneo que esté relativamente cerca (Tarragona, Marsella, Palma, Valencia, Murcia...). El conseller, hasta ahora, siempre ha restado importancia al origen del agua y se ha centrado en la dificultad de conseguir los buques, "la parte más difícil del operativo", como se demostró en 2008.

Retrasos en la Tordera

Hasta la fecha, Moncloa ya ha ofrecido más de 500 millones a Catalunya en la lucha contra la escasez de agua, aunque la gestión de las cuencas internas es competencia exclusiva de la Generalitat. Buena parte de este monto va destinada al coste de las dos futuras desalinizadoras, en forma de préstamo. Hoy por hoy, el Gobierno, así lo afirmó su delegado en Catalunya, Carlos Prieto, considera que la administración autonómica es quien tiene pendientes los trámites oportunos para empezar con la construcción.

En el encuentro también se hablará de las dos futuras desalinizadoras en los ríos Tordera y Foix

De hecho, fuentes de la empresa pública ATL (Ens d'Abastament d'Aigua Ter Llobregat) aseguran que durante este primer trimestre se licitarán las obras, que empezarían en enero de 2026 y finalizarían en diciembre de 2027. En el encuentro de hoy entre Ribera y Mascort también se podrá encima de la mesa este calendario para evaluar cómo puede colaborar el ministerio en todo el proceso.

Los pactos a los que lleguen Mascort y Ribera se anunciarán después del encuentro, que, según detalla el ministerio, también servirá para poner sobre la mesa otros temas de interés común, aunque no estén relacionados con la sequía.

Suscríbete para seguir leyendo