Educació convoca un 'consell escolar' extraordinario para abordar la regulación del móvil

La regulación sobre el uso del móvil, la gran protagonista de (casi) todos los debates en el inicio de este curso escolar, llegará por fin la semana que viene al Consell Escolar de Catalunya (CEC), en un debate extraordinario convocado por el presidente del consejo, Jesús Vinyes, y por la directora general de Atención a la Familia y Comunidad Educativa del Departament d'Educació, Raquel García. Antes, este jueves, día 9, el Consell Escolar Municipal de Barcelona (CEMB) "debido a la escalada y la centralidad que está tomando estos días el debate sobre la regulación del uso de los móviles", ha decidido ampliar la convocatoria a todos los miembros del CEMB y transformar la sesión de debate monográfico en un pleno extraordinario y cambiar su formato de 'on line' a sesión presencial; según ha podido saber EL PERIÓDICO. La presión social ha llevado a la 'conselleria' a coger el toro por los cuernos.

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El tema está en la agenda y lo ha puesto la comunidad educativa: docentes y familias. Los primeros, prohibiendo o regulando su uso en el instituto (en algunos casos por presión de las familias y en otros por iniciativa propia, al verse superados); y las segundas, con un movimiento de base de familias organizadas -por el momento, vía grupos de whatsapp y telegram- para acabar con la presión social que lleva a comprar el primer 'smartphone' a los 12 años, con el paso de la escuela de primaria al instituto. Un movimiento que en pocas semanas ha obtenido un impacto inesperado por sus propios impulsores, llegando a las 10.000 familias en toda Catalunya (y con grupos 'hermanos' que han empezado a nacer en otros puntos del Estado como Madrid y Mallorca).

Son dos debates paralelos -una cosa es regular qué pasa en el colegio y otra muy distinta qué hacemos en casa- pero están estrechamente vinculadas: si los niños no tienen móvil no lo llevarán al colegio.

Sobre el primero, hoy por hoy el Departament pone toda la presión en la dirección de los institutos, delegando la responsabilidad en en cada centro vía la famosa autonomía de centro. "Hay centros que tienen prohibida la entrada de móviles, pero eso es una cuestión que tiene que quedar recogida en las normas de funcionamiento de cada centro. Estas decisiones se tienen que hablar y trabajar dentro del consejo escolar de cada centro. La entrada de los móviles en los centros no es mala per se. Aquí hay una cuestión previa que es la formación en un buen uso del móvil en la que también tienen que participar las familias", respondía la 'consellera' Anna Simó en una entrevista a este diario realizada el pasado 31 de agosto, antes de que estallara la polémica.

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"Me gustaría que Catalunya fuera ejemplo por tener unos consejos escolares donde las familias y los docentes puedan tomar decisiones como esa a partir de evidencias; pero que ese no sea un debate que venga de arriba abajo. Verticalmente no sirve", añadía la 'consellera' en la misma entrevista.

Dos semanas más tarde, el 'conseller' de Salut, Manel Balcells, hablando de la futura ley de adicciones que prepara el Govern, afirmaba que la nueva norma podría permitir regular el uso de teléfonos móviles en escuelas e institutos. "Los problemas de comportamiento alimentario van muy ligados a las pantallas y la presión estética que conllevan las redes. Esto se traslada a que nuestra juventud está entrando en muchos temas de salud mental, incluso triplicando los intentos de suicidio", añadía Balsells.

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Y, el 5 de octubre, dos semanas más tarde -ya en pleno debate-, en una entrevista con Gemma Nierga, Simó anunció un debate en todos los institutos de Catalunya sobre el móvil en las aulas. "Antes de fin de este año todos los institutos habrán tenido un debate sobre el uso del móvil en los centros. Tenemos ya los datos de cómo está regulando el tema cada centro. Los analizaremos y a finales de octubre o principios de noviembre iniciaremos un debate a nivel de consejos territoriales en que que se plantearán preguntas como '¿prohibirías los móviles?, ¿'por qué?', '¿los regularías?', '¿cómo?'", detalló aquel 5 de octubre Simó.