Sector forestal

Machismo en el bosque: ellas son las propietarias pero las decisiones las toman ellos

Los propietarios privados de Collserola se unen por primera vez para proteger los bosques de incendios y sequía

Jordi Tarradas: "Falta personal y tiempo para gestionar los bosques"

Tres mujeres trabajando en el bosque.

Tres mujeres trabajando en el bosque. / El Periódico

Guillem Costa

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Uno de cada tres bosques privados (la mayoría lo son) están en manos de mujeres, que son las propietarias de esos terrenos. Sin embargo, la toma de decisiones sobre cómo gestionar estos espacios no las toman ellas. Y de los trabajos realizados in situ, en el 92% de las ocasiones, se encargan los hombres, que siguen siendo los principales trabajadores de los bosques.

Las mujeres que trabajan sobre el terreno solo son un 9% y están invisibilizadas, según un nuevo estudio encargado por Acció Climàtica

Es decir, las mujeres también están invisibilizadas en el sector forestal, un ámbito laboral que justo empieza a crecer en Catalunya. Estas son las principales conclusiones de un nuevo estudio encargado por la Conselleria d'Acció Climàtica, que se ha presentado este marts en Avinyó (el Bages) y que también muestra la poca presencia de mujeres en el sector de la pesca continental (en ríos y lagos).

"La igualdad real esta muy lejos y los comportamientos machistas todavía están presentes"

Anna Sanitjas

— Directora de Bosques de la Generalitat

"Este diagnóstico no solo debe servir para radiografiar al sector, sino también para cambiarlo. La igualdad real está muy lejos y los comportamientos machistas todavía están presentes", reconoce Anna Sanitjas, directora de Boscos i Ecosistemes Forestals de la Generalitat. Propone visibilizar este 9% que sí trabaja entre árboles: "Lanzamos un plan para acercarnos a esta igualdad. Lo primero que haremos es montar un grupo de trabajo para que las mujeres propietarias de bosques se empoderen y tomen decisiones".

En muchos casos, las decisiones las toman otros propietarios o simplemente familiares suyos que son hombres. "Sobre todo hijos y maridos son los que se acaban encargando de decidir qué se hace en este bosque, por mucho que la titularidad sea de una mujer. Y esto tiene que cambiar", advierte Sanitjas. También se montará una exposición fotográfica para reivindicar a las trabajadoras forestales.

El plan de política forestal, que debe dibujar el futuro de la gestión de los bosques en Catalunya, incluirá medidas para avanzar en la igualdad entre hombres y mujeres

El peso de la tradición

El Departament está redactando el plan general de política forestal, que debe dibujar el futuro de la gestión de los bosques en Catalunya. Y aquí, está previsto que se incluyan medidas para llegar a la igualdad entre hombres y mujeres.

El estudio evidencia que los hombres no son integradores con las mujeres que trabajan en el bosque

¿Cómo se puede revertir esta situación? Uno de los puntos donde poner el foco es en la universidad, por ejemplo, además de promover la contratación de mujeres por parte de los empleadores. Las mujeres que escogen estudiar ingeniería forestal o grados profesionales relacionados con los bosques apenas suponen un 20% de los estudiantes, un escenario que no contribuye a cambiar las cosas.

Tradicionalmente, las tareas forestales han sido siempre un ámbito reservado para los hombres. El estudio evidencia que ellos no suelen mostrar una voluntad de inclusión e integración hacia las mujeres que dan el paso y se atreven a trabajar ahí. Al contrario, a menudo adoptan una mentalidad antigua y desacreditan a sus compañeras, reza el estudio.

Discriminaciones

A este machismo subyacente, se suman obstáculos como el cuidado de los hijos o los horarios difíciles de este sector, que refuerzan la "distancia cultural" entre las mujeres y el bosque.

Las discriminaciones, como en otros sectores, son constantes. La ropa de trabajo, por ejemplo, está pensada para cuerpos masculinos y los prejuicios de género hacia los trabajos manuales provocan que, habitualmente, las mujeres estén más presentes en labores de gestoría o investigación y no tanto sobre el terreno.

"Siempre hablamos de introducir el talento femenino, porque las mujeres buscan el trabajo colaborativo y no suelen ser tan individualistas. Y estos valores se deberían tener en cuenta en los bosques, que son claves para el futuro de Catalunya", considera Sanitjas.