Alerta por sequía en 135 municipios del Anoia-Gaià, el Ter y el Llobregat

La Agència Catalana de l'Aigua (ACA) ha declarado la alerta hidrológica en la cabecera del río Ter, el Llobregat medio y el Anoia-Gaià a raíz de la sequía pluviométrica que están acumulando estas zonas en los últimos meses. La medida afecta a 135 municipios de las comarcas de Osona, Ripollès, Anoia, Alt Penedès, Bages, Berguedà, Moianès y Vallès Occidental.

Según informa la ACA, los municipios afectados no dependen del agua de los embalses ni de grandes acuíferos y su abastecimiento se calcula a partir de la pluviometría, puesto que disponen de captaciones propias (pozos, agua superficial o balsas) para garantizar las demandas. La medida incluye limitaciones como la reducción de agua para riego agrícola, usos ganaderos, industriales y también recreativos.

En concreto, la reducción del consumo de agua que ha establecido la ACA por los diferentes usos es la siguiente: un 25% en el regadío agrícola, un 10% en los usos ganaderos, un 5% en los industriales, un 30% en los recreativos que impliquen riego y un 5% para otros usos recreativos.

Consumo máximo

Por lo que respecta a los usos de abastecimiento doméstico, la ACA establece restricciones a particulares para determinados usos urbanos como las limitaciones en el riego de jardines y zonas verdes, la prohibición de llenar las fuentes ornamentales, la prohibición a particulares de limpiar las carreras con agua de la red, limitaciones en el llenado de piscinas o también en la limpieza de vehículos. También se define una cifra para el consumo global de agua a un máximo de 250 litros por habitante y día.

Actualmente, el acuífero de Carme-Capellades sigue, desde mayo, en estado de alerta. Según informa la ACA, aunque en los últimos meses el nivel se ha mantenido bastante estable, se ha decidido mantener en el escenario de alerta, una medida que afecta a 15 municipios de Anoia y uno del Alt Penedès.

En cuanto al sistema Ter-Llobregat, con sus reservas al 45%, continúa en el escenario de prealerta, así como Darnius-Boadella, que está cerca del 47% de su capacidad. La ACA informa que desde el mes de febrero las desalinizadoras catalanas han producido 33 hm3 de agua, lo que ha ralentizado el descenso de reservas de los embalses. Sin su aportación, hoy los embalses estarían 5 puntos por debajo.

Fuentes alternativas

El plan de sequía establece que, en caso de que sea posible, las unidades que se sitúen en el escenario de alerta puedan utilizar fuentes de agua alternativas para garantizar las demandas y ralentizar así el descenso de reservas.

En el caso del acuífero de Carme-Capellades se definen medidas para coordinar las extracciones del acuífero con la captación proveniente del sistema Ter-Llobregat. Por tanto, mientras dure la situación de alerta, los municipios que dispongan de una conexión a este sistema reducirán sus extracciones del acuífero incrementarán el consumo de agua de la red Ter-Llobregat.

En Osona no vivían una situación de sequía de esa magnitud desde los años 80. Así lo ha explicado al ACN el vicepresidente del Consell Comarcal d'Osona, Carles Banús, que ha relatado hacía años que no se veía un caudal del río Ter tan bajo: "En la poca pluviometría se ha añadido que la nieve de la montaña se deshizo muy rápido".

Por eso, se hace un llamamiento a los ciudadanos para que reduzcan el consumo de agua. Banús recuerda que la limitación de 250 litros por habitante y día no solo es para el uso ciudadano, sino que también incluye el uso que realizan las industrias agroalimentarias o los ganaderos. "Debemos colectivizar el uso de agua para perjudicar al mínimo de gente posible", pide Banús.