De la ocupación de Palestina al "derecho a defenderse" de Israel: ¿Por qué el Parlament todavía no se ha pronunciado?

Casi tres semanas después de la escalada del conflicto entre Israel y Palestina y mientras la cifra de víctimas asciende sin freno, el Parlament sigue mudo a nivel institucional. Los grupos siguen intentando solventar sus diferencias para que durante el pleno que ha arrancado este martes y acaba el jueves se lea una declaración posicionándose sobre la cuestión. PSC, Junts y Ciutadans tienen un texto prácticamente perfilado que ya reuniría una mayoría suficiente, pero socialistas y posconvergentes no renuncian a sumar a ERC en la ecuación para lograr un acuerdo más transversal. "Con Junts ya estamos de acuerdo, pero queremos que sea mayoritaria", reconocen fuentes socialistas, que también recuerdan que hay tiempo hasta el jueves para llegar a un acuerdo. Las referencias a la ocupación de Palestina o el reconocimiento del derecho a defenderse de Israel son dos de los escollos que alejan posiciones.

La semana pasada, Junts y Ciutadans presentaron en la junta de portavoces una propuesta de texto, pero ninguno de ellos contaba con apoyos suficientes y se dieron más tiempo para negociar. Tras una semana de conversaciones abiertas, el texto que manejaban los tres grupos este martes por la tarde, y al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, califica de "ataque terrorista" la matanza de Hamás del pasado 7 de octubre y reconoce el derecho de Israel a defenderse "dentro de los límites que marcan el derecho humanitario y los tratados internacionales"; pero también pide un "urgente alto al fuego", el cese de los bombardeos en Gaza o la apertura de corredores humanitarios, así como también recuerdan que el Parlament se ha posicionado en más de una ocasión a favor de "la solución de los dos estados que prevé una Palestina independiente, vecina del estado de Israel".

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Ya esta mañana, en una rueda de prensa desde el Parlament, la diputada Anna Grau ha atribuido la falta de formalización del acuerdo más a un tema de "prudencia" que de redactado, aunque no ha descartado que haya "intentos de reventarlo" que lo puedan "hacer naufragar". Los naranjas temen que los socialistas, presionados por el contexto de las negociaciones de investidura y ante el temor de que haya novedades en el frente que dificulten algunos de los postulados, acaben saltando de la ecuación, cosa que implicaría que finalmente no haya declaración ninguna por falta de mayoría.

Los socialistas quieren tratar de impedir que se repita la foto que ya se dio en el Ayuntamiento de Barcelona, donde Junts y PSC aprobaron una declaración que apoyaron PP y Vox. Por ello, socialistas y posconvergentes mantienen conversaciones abiertas con ERC a riesgo de que, si se acaban sumando, sea el partido naranja el que se descuelgue. Para Cs, es imprescindible que haya un "reconocimiento de Hamás como grupo terrorista" y que se reconozca "el derecho de Israel a existir y a defenderse".

Por su parte, los republicanos, que apelan a andar con pies de plomo para que el Parlament no contribuya a generar ruido ante un grave conflicto que está causando tanto sufrimiento, aseguran que una declaración institucional no puede obviar la ocupación de Palestina -punto que el redactado actual no recoge-, así como las resoluciones internacionales que hacen referencia a la vulneración de derechos por parte de Israel. Mientras, los Comuns se ven fuera de un supuesto acuerdo que tachan de tibio. "Sin condena clara a Israel, no entraremos", sostienen desde En Comú Podem, que precisan que mantener la referencia al "derecho a defensa" de Israel es una suerte de "carta blanca" para continuar sus ataques.

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La CUP también mantiene sus postulados y no prevé sumarse a ningún nuevo texto. En una rueda de prensa desde el Parlament, la diputada Laia Estrada ha insistido en el "genocidio que sufre el pueblo palestino" y ha vuelto a pedir "el alto al fuego", el "levantamiento del asedio en Gaza", así como el "fin de la ocupación", el cumplimiento de las resoluciones internacionales y el "embargo de armas del estado de Israel". Términos incompatible con los de los impulsores de la declaración.

Cinco declaraciones en 20 años

El año pasado, el Parlament ya fue foco de polémica porque se aprobó una propuesta de resolución quien acusaba a Israel de perpetrar un 'apartheid' contra Palestina, afirmación que generó un rechazo rotundo por parte de Junts. En los últimos años, la Cámara catalana ha acordado hasta cinco declaraciones institucionales sobre el conflicto. La última fue en junio de 2021, para condenar los ataques de los colonos sionistas en el barrio de Sheij Yarrah. En aquella ocasión, no hubo unanimidad, pero sí amplio consenso. PSC, ERC, Junts, la CUP y los Comuns acordaron un texto en el que lamentaban estas ocupaciones y denunciaban que lo hicieran, además, con la "protección del gobierno de Israel". También pedían al Estado de Israel que se retirara de los territorios ocupados y garantizar los "derechos fundamentales" de los palestinos.

Sin embargo, la última declaración que consiguió el apoyo de toda la cámara fue en 2014, ante otra escalada del conflicto. En aquella ocasión, se apostaba por frenar "la ofensiva del ejército israelí sobre Gaza", así como los "ataques de grupos armados palestinos a Israel". En los últimos 20 años ha habido tres declaraciones más. La única que también consiguió unanimidad fue la de 2004, cuando la Cámara leyó una declaración en motivo de la muerte del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yaser Arafat. En 2010 fue solo una mayoría de la Cámara la que condenó el ataque del ejército de Israel a la Flota per la Llibertat, un convoy internacional con ayuda humanitaria para Gaza; mientras que el 2022 una mayoría de la cámara, apostó por la solución de los "dos estados" y el derecho de los dos pueblos a tener un "estado propio". 

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