Puigdemont pide cotinuidad independentista al frente de la Cambra

 El 'expresident' y eurodiputado, Carles Puigdemont, ha mostrado su apoyo a la candidatura independentista de Mònica Roca y Toni Fitó para seguir al frente de la Cambra de Comerç de Barcelona. Puigdemont ha recibido en su residencia de Waterloo a ambos responsables de la entidad y ha aprovechado para expresar su voluntad de que "consoliden" su actual mandato.

En un tuit, el 'expresident considera que la gestión de Roca constituye "un proyecto disruptivo para poner a la Cambra al servicio de los autónomos y empresarios. Un trabajo excelente que Barcelona y el país piden que consolidéis los próximos cuatro años". Este mensaje y la reunión llegan poco después del contundente mensaje muy crítico de Roca hacia el Govern de ERC. "Su falta de valentía perjudica al empresario", espetó esta semana la dirigente.

¿Qué empresas se presentan a las elecciones a la Cambra de Comerç?

El mandato del actual gobierno de la Cambra está a punto de finalizar y dar paso a las votaciones para renovar el pleno de la institución, entre el 15 y el 20 de septiembre. el equipo 'Eines de País' hoy liderado por  Roca y en su día por Joan Canadell -actual diputado de Junts per Catalunya en el Parlament-, finaliza el período de mandato con una espina clava: la nueva ley de Cambres. Un proyecto legislativo con el que perseguían obtener más financiación pública para la entidad, que ya se arrastraba de cuando Quim Torra era 'president' y que con el actual Govern no ha encontrado apoyos. 

Reelección incierta

Puigdemont da un espaldarazo a Roca y a Fitó en un momento en que ambos no tienen garantizada una mayoría independentista en la organización empresarial. Fitó ha ido ganando peso desde la presentación de la candidatura y en frente tienen al exconsejero delegado de DKV, Josep Santacreu, cabeza visible de ‘Va d’Empresa’ y con el apoyo de compañías como Ficosa, Ametller, Colonial, Comsa o Focus, entre otros.

En estas elecciones están en juego 52 de las 60 sillas que conforman el pleno de la institución. Estas se distribuyen entre sectores en función de su peso económico en Barcelona (por ejemplo, la industria textil se queda con una y el comercio con diez) y el votante tiene que elegir entre las empresas que se propongan para ocupar las butacas de su sector. Es su misión conocer de antemano cuáles son las más afines a una candidatura o a otra. Es decir, a un potencial presidente o a otro.