Los independentistas de la Cambra cierran mandato criticando al Govern: "Su falta de valentía perjudica al empresariado"

El gobierno de empresarios independentistas que dirigen la Cambra de Comerç de Barcelona finalizan mandato. En el poder desde las elecciones del 2019, al equipo de ‘Eines de País’, hoy liderado por Mònica Roca y en su día por Joan Canadell, se les ha quedado una espina clava: la nueva ley de Cambras. Un proyecto legislativo con el que perseguían obtener más financiación pública para la entidad, que ya se arrastraba de cuando Quim Torra era 'president' y que con el actual Govern no ha encontrado apoyos. 

"Que no haya valentía para aprobar la ley perjudica al empresariado", le ha reprochado Roca en la que puede ser su última rueda de prensa como presidenta de la Cambra. Y es que entre el 15 y el 20 de septiembre se abren las votaciones para renovar el pleno de la institución, que a su vez deberá escoger el nuevo equipo de gobierno.

Las elecciones a la Cambra de Comerç serán del 15 al 20 de septiembre

Y si bien Roca se presenta de nuevo en la candidatura de ‘Eines de País’, no está claro ni que obtenga mayoría, ni que, de obtenerla, sea escogida entre los suyos de nuevo presidenta. Su actual número 2, Toni Fitó, ha ido ganando peso desde la presentación de la candidatura y en frente tienen al exconsejero delegado de DKV, Josep Santacreu, cabeza visible de ‘Va d’Empresa’ y con el apoyo de compañías como Ficosa, Ametller, Colonial, Comsa o Focus, entre otros.

La actual dirección de la Cambra ha celebrado este viernes, a una semana del inicio de los comicios, una rueda de prensa para presentar un balance de su actuación al frente del organismo. En ella han destacado que desde los servicios de la Cambra han atendido a 56.000 empresas, especialmente durante los momentos más duros de la pandemia. También que han reformado la actual sede del organismo, ubicada en el 452 de la avenida Diagonal, vía inversión de unos 7,5 millones de euros y que esperan recuperar en aproximadamente un lustro una vez esté a pleno rendimiento y puedan alquilar los espacios.

Pendientes de una licitación de 50 millones

No obstante, varias carpetas se han quedado en el cajón de 'pendientes'. La más "frustrante", según ha reconocido Roca, es esa nueva ley de cámaras, que no ha contado con el apoyo de la 'conselleria' de Empresa i Treball, liderada por Roger Torrent. El hecho que las patronales más representativas de Catalunya, Foment del Treball pero especialmente Pimec, estén en contra de dicha norma, ha contribuido a que no tirara adelante.

Otra cuestión que ha quedado en suspenso debido tanto a las recientes elecciones municipales, como a las inminentes a la Cambra, ha sido la construcción de la nueva sede de la entidad en el 22@. Estaba previsto que durante este 2023 la Cambra, en coordinación con el consistorio -pues los terrenos son municipales- sacará a concurso por unos 50 millones de euros la construcción de un nuevo edificio de 21 plantas. Este, en parte debía albergar la nueva sede de la entidad, en parte debía habilitar alquileres para empresas y coworkings. El nuevo presidente o presidenta deberá acabar de concretar esta licitación.

Roca ha aprovechado el balance de su mandato para poner deberes a las administraciones en materia económica. Los estudios que ha ido presentado la Cambra durante los últimos meses apuntan hacia un estancamiento de los salarios durante las dos últimas décadas en Catalunya. Mientras las inversiones productivas no han logrado aumentar la competitividad de las empresas. "Tenemos que encontrar un patrón de crecimiento sostenible", ha declarado la presidenta de la Cambra.

También ha recriminado a la Generalitat su falta de acción en materia de transición energética. Según los últimos datos recopilados por la entidad, Catalunya en 2022 arrastraba un déficit de inversiones en energías renovables de 59.024 millones de euros. Es decir, para cumplir con los objetivos de sostenibilidad de la ONU, Catalunya debe destinar el equivalente al 0,67% de su PIB anual durante las próximas tres décadas. Y, por el momento, la economía catalana no está corrigiendo ese diferencial.