El PP avisa a Sánchez de que no puede negociar el modelo de financiación de forma "bilateral"

El modelo de financiación autonómica del régimen común (el que afecta a todas las comunidades menos a Euskadi y Navarra) está caducado desde 2014. Se tendría que renovar cada cinco años, pero en aquellas fechas, el Gobierno de Mariano Rajoy (PP) no vio oportuno recalcularlo porque España estaba saliendo de la crisis de 2008 y, como decía el entonces ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, la caja estaba vacía y había poco o nada que repartir. Tampoco ha rematado el asunto Pedro Sánchez en los cinco años que lleva en la Moncloa. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, avanzó algo con expertos y contactos con las comunidades, pero la pandemia de covid y las numerosas elecciones en esta etapa (andaluzas en 2022 y todas las de este año) dificultaron la misión.

El problema de la deuda puede abrir fisuras entre los barones del PP, cada uno con su propio interés en su comunidad

Estos días, Montero ha admitido que la financiación autonómica puede ser una variable clave en las conversaciones entre el PSOE y los partidos a los que quiere pedir su apoyo para la investidura de Sánchez, en especial, Junts y ERC. La condonación de la deuda de Catalunya, un asunto que ya se ha hablado en el pasado reciente, puede resultar especialmente atractiva para esas dos formaciones, aunque esa petición es transversal y también ha llegado en los últimos años desde comunidades gobernadas por el PP, como Murcia.

Las ocho comunidades más endeudadas por orden, según datos del Banco de España son: Catalunya, Comunidad Valenciana, Madrid, Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Galicia y Murcia.

El PSOE pone sobre la mesa de Junts y ERC la financiación y elude la amnistía o el referéndum

Ante este debate, el vicesecretario del PP, Juan Bravo, recomendó este miércoles que el Gobierno, que está en funciones, convoque al Consejo de Política Fiscal Financiera (CPFF), el órgano donde están presentes el Ministerio y las comunidades. Bravo no quiere que el Gobierno de "forma bilateral" asuma ningún compromiso para "conseguir votos" para la investidura de Sánchez.

Fuentes de la dirección del PP esperan que el PSOE no quiera "repetir el mismo error que José Luis Rodríguez Zapatero" en 2009, cuando aprobó el modelo vigente, y lo sacó "por la mínima, solo con el apoyo de ERC". "Estamos hablando de sanidad, educación y políticas sociales. Hay que intentar que el sistema cuente con el mayor respaldo posible, igual que hizo José María Aznar en 2001, que consiguió un apoyo de más del 90%", señalan esas fuentes.

Un debate viejo

El asunto del alivio de la deuda es un debate viejo, incluso el propio ministro Montoro (PP) introdujo en 2018 una disposición en la Ley de Presupuestos del Estado que abría la puerta a alargar plazos y bajar intereses al dinero que se debía al propio Estado. Y más recientemente, en esta última legislatura, en octubre de 2021, Montero se comprometió con Joan Baldoví (Compromís) en el Congreso el problema del endeudamiento cuando se abriera el melón de la financiación autonómica. La ministra señaló que la "insuficiente financiación" en algunas comunidades autónomas (citó en concreto a la Comunidad Valenciana y Murcia) "ha generado" al menos "una parte muy importante de la deuda".

Los populares esperan que el PSOE no cometa "el mismo error" que Zapatero, que aprobó con un apoyo mínimo el nuevo sistema

Estas palabras de Montero a Baldoví en el Congreso fueron aquel día celebradas por Fernando López Miras (PP), presidente de la Región de Murcia. Según dijo López Miras hay informes que dicen que "aproximadamente el 90%" de su comunidad "es debida a esa infrafinanciación durante tantos años recibiendo menos que el resto de España". Cuando Baldoví hizo esa reclamación gobernaba la Comunidad Valenciana Ximo Puig (PSOE), ahora lo hace Carlos Mazón (PP). El actual presidente, para no meterse en problemas en su partido, se ha limitado a decir estos días que no quiere que el nuevo sistema "se negocie en un cuarto oscuro".

Extraños compañeros de cama

Porque el asunto de la deuda y la condonación puede convertirse en un problema para los conservadores y abrir una fisura en el PP, que pasa un momento delicado después de su victoria amarga el 23J. La financiación autonómica hace extraños compañeros de cama. Las autonomías se alinean según sus intereses particulares (despoblación, peso del turismo, importancia de las grandes ciudades, infraestructuras...) y no tanto por partidos políticos.

La posición de López Miras, todavía pendiente de revalidar su cargo tras lograr una victoria amplia en las urnas en mayo, choca de plano con lo que ha expresado la Comunidad de Madrid, que censura cualquier gesto de perdón por la deuda. En esta línea de rechazo y menos templado que Bravo se expresó este miércoles Miguel Tellado, vicesecretario de Organización del PP. Tellado rechazó una quita general a todas las comunidades porque "sería un error" ya que se puede "premiar a quien peor ha gestionado sus recursos y porque se hace un llamamiento a la irresponsabilidad en la gestión económica de las comunidades".