De forma provisional

Marín (PSC) encuentra en ERC el apoyo para aprobar las ordenanzas fiscales de L’Hospitalet para 2024

La subida del 3% del IBI tras años de tasas congeladas se ha traducido en un debate entre modelos de gestión que ha enfrentado a derechas y socialistas

Marín encara un nuevo mandato en L'Hospitalet con un gobierno en minoría y pactos puntuales

Núria Marín redibuja su gobierno en L'Hospitalet con la "tercera gran transformación" urbana en el foco

Núria Marín, alcaldesa de L'Hospitalet.

Núria Marín, alcaldesa de L'Hospitalet. / Manu Mitru

Àlex Rebollo

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El Gobierno de Núria Marín (PSC), alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelonès) ha aprobado de forma inicial las ordenanzas fiscales para 2024, es decir, las modificaciones en los impuestos municipales para el próximo año. Una cuestión para nada baladí, dado que es una de las principales bases sobre la que construir luego el presupuesto municipal. Las ordenanzas se someterán ahora a un periodo de alegaciones para, en unos meses, aspirar a su aprobación definitiva.

Marín, que gobierna en minoría en la segunda ciudad de Catalunya, ha sacado adelante la propuesta -la primera gran cuestión del nuevo mandato- gracias al voto favorable del grupo de ERC-EUiA, que lidera el exsocialista Jaume Graells, y a la abstención de En Comú Podem. Por su parte, los concejales de PP y Vox en el hemiciclo han votado en contra de la propuesta, principalmente, debido a la subida de un 3% del Impuesto sobre Bienes e Inmuebles (IBI) planteada.

Se da la circunstancia de que el ahora portavoz de los republicanos fue el denunciante de las supuestas irregularidades en el Consell Esportiu de L’Hospitalet, un caso todavía judicializado y que se cobró la dimisión de otros dos concejales del PSC: Cristian Alcázar y Cristóbal Plaza. Con todo, Graells ha defendido que “los recursos con la recaptación del IBI son claves para las arcas”. “Ahogar las finanzas municipales implica atentar contera la situación de las familias más vulnerables”, ha remarcado el líder de ERC.

Por su parte, Núria Lozano, de En Comú Podem, ha dicho que los cambios en las tasas municipales propuestas les parecen “razonables y los compartimos como necesarios y en algunos casos convenientes”. Sin embargo, la edil de los ‘comuns’ ha comentado que han encontrado a faltar conceptos como la tarifación social, es decir, una mayor “progresividad en cualquier contribución ciudadana a la financiación de un servicio público municipal”.

El IBI y los modelos de gestión

El Gobierno de L’Hospitalet prevé aumentar los ingresos municipales en 5,3 millones de euros con su propuesta de ordenanzas fiscales para el próximo año. Para ello, se incrementará un 3% el tipo general del IBI y un 5% el tipo diferenciado, aquel que se aplica a los equipamientos hoteleros y centros comerciales, entre otros. Desde el Ayuntamiento hospitalense defienden que este incremento del 3% del IBI supondrá un incremento de menos de 20 euros en la cuota anual para “el 90% de las viviendas de la ciudad”.

Sin embargo, esta subida del IBI ha provocado un choque entre los grupos de la derecha del Pleno hospitalense (PP y Vox) y el PSC por el modelo de gestión. “Los precios de los suministros han subido y no hay ninguna medida para ayudar a las familias o comerciantes”, ha manifestado Sonia Esplugas, portavoz del Partido Popular en el consistorio, quien ha calificado la propuesta de “decepcionante”.

“Está claro que el modelo izquierda-socialista es promover la subida de impuestos, que no es el modelo del PP, que cuando gobierna baja impuestos”, ha añadido la líder de los populares en L’Hospitalet. En la misma línea se ha expresado el portavoz de Vox, Francisco González, quien ha añadido que el ejecutivo de Marín usa luego el dinero recaptado para mantener “chiringuitos” en materia LGTBI o en el Districte Cultural de la ciudad.

Jaume Graells (ERC) interviene en el Pleno del Ayuntamiento de L'Hospitalet.

Jaume Graells (ERC) interviene en un Pleno del Ayuntamiento de L'Hospitalet. / Jordi Otix

A las críticas ha respondido el primer teniente de alcaldesa y concejal de Hacienda y Urbanismo, Fran Belver (PSC), quien ha celebrado que por primera vez el debate sobre las ordenanzas acontezca en un debate político y sobre la gestión de la ciudad: "Evidentemente, el modelo es diferente y nos sentimos orgullosos de tener un modelo diferente al suyo”. “Rebajar impuestos para acabar con servicios públicos no es nuestro modelo, como han demostrado ustedes donde han gobernado”, ha añadido Belver.

En el mismo sentido se había expresado justo antes Jaume Graells, que aunque ha reconocido que la subida del 3% puede suponer un “gran sacrificio” para algunas familias, ha apuntado que “no hacerlo tiene un mayor coste para vecinos vulnerables”, debido, en gran medida, a la necesidad de aumentar la recaptación para hacer frente a los gastos derivados de los servicios públicos.

Otros impuestos

En cuanto a las bonificaciones al IBI, se mantienen las existentes para: familias numerosas, viviendas de protección oficial, instalación de sistemas de energía proveniente del sol y viviendas de alquiler social cedidas a la bolsa de vivienda del Oficina Municipal de la Vivienda.

Además, se añaden nuevas, como la bonificación del 25% de la cuota del impuesto para viviendas destinadas a alquiler con renta limitada que tengan la calificación de protección oficial y que sean propiedad de una administración pública, organismo o entidad vinculada o dependiente.

Así, el resto de impuestos -el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica (IVTM), el impuesto sobre actividades económicas (IAE) y el impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO)- mantienen el tipo tributario existente.