Verano urbano

Alta densidad y pisos de los años 50: así vive el medio millón de vecinos de la Gran BCN que más sufre el calor

Un estudio del Institut Metròpoli ubica a 526.000 persones del área metropolitana en zonas altamente vulnerables a las altas temperaturas

CONTEXTO | BCN, L'Hospitalet y Santa Coloma, las ciudades metropolitanas más vulnerables al calor extremo

MAPA | El área de Barcelona sufre nueve de los diez kilómetros con más densidad poblacional de Europa

Tres niños juegan con el agua de una fuente del barrio de Santa Rosa, en Santa Coloma de Gramenet, una de las áreas vulnerables estudiadas.

Tres niños juegan con el agua de una fuente del barrio de Santa Rosa, en Santa Coloma de Gramenet, una de las áreas vulnerables estudiadas. / Laura Guerrero

Manuel Arenas

Manuel Arenas

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La fragilidad ante las inclemencias del sofocante calor veraniego también va por barrios. La manera de sobrellevar el bochorno no es territorialmente uniforme y depende en buena medida de las condiciones y recursos con los que cuenta el área en que los vecinos residen.

El fenómeno de la vulnerabilidad a las altas temperaturas en el área metropolitana de Barcelona de los 3,3 millones de habitantes es el que ha estudiado el Institut Metròpoli, referente en investigaciones sociales del contexto metropolitano, que en su nuevo informe 'La calor en un futur: Índex de vulnerabilitat al canvi climàtic (IVAC)' (2022), impulsado por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), radiografía las zonas de la Gran Barcelona que, por sus características socioeconómicas, más expuestas están a los perjuicios de la canícula.

El estudio da continuidad a la aproximación de 'Vulnerabilidad al calor extremo' (2018), dictamen editado por el AMB a partir de un Trabajo de Fin de Máster en la Universitat de Barcelona, que tal y como publicó este diario ya situaba a Barcelona, L'Hospitalet de Llobregat y Santa Coloma de Gramenet como las ciudades metropolitanas con mayor proporción de secciones censales altamente vulnerables al calor extremo.

En esta ocasión, el nuevo informe metropolitano aporta un dato hasta la fecha inédito: 526.000 habitantes del área metropolitana de Barcelona (un 16,1% de la conurbación) viven en "zonas de alta vulnerabilidad" al cambio climático.

Zonas entre las que destacan los distritos barceloneses de Ciutat Vella y Nou Barris, con el 92,15% y el 41,48% de sus habitantes repectivamente viviendo en "áreas de elevada vulnerabilidad"; L'Hospitalet de Llobregat, con el 51% de vecinos residentes en zonas altamente vulnerables; y Santa Coloma de Gramenet, con el 36,71% de población ubicada en las citadas áreas.

"Aunque los datos son limitados, nos permiten concluir no el total de personas vulnerables al calor, sino el total de personas que viven en zonas vulnerables al calor en el área metropolitana", precisa Elena Domene, coautora del informe y jefa del Área de Sostenibilidad Urbana del Institut Metròpoli.

Alta densidad, pocos parques y viviendas antiguas

El montante poblacional del medio millón de vecinos resulta de sumar la población de cada sección censal que presenta valores superiores a 61 en el IVAC (Índex de Vulnerabilitat al Canvi Climátic), un índice sintético calculado por las investigadoras del Institut Metròpoli a partir de 17 variables con fuentes y años dispares que van desde datos del Catastro de 2019 hasta el Atlas de Distribución de Renta por Hogares del Instituto Nacional de Estadística de 2017.

Entre esas variables, seleccionadas a partir de literatura científica al respecto, se hallan la proporción de viviendas anteriores a 1950 y entre 1951 y 1980; el porcentaje de cobertura vegetal (zonas verdes); la densidad de población; la renta media por hogares; la cuota de mujeres de más de 65 años; la cantidad de personas de más de 75 años que viven solas; o el porcentaje de migrantes provenientes de países en desarrollo, entre otros.

Esas variables, a su vez, se agrupan en cuatro 'componentes' que, interpretativamente, arrojan los elementos que más determinan la elevada vulnerabilidad: zonas densamente pobladas y con falta de espacios verdes y bajo potencial fotovoltaico; población con renta baja y menos proporción de población con estudios superiores; mujeres mayores en viviendas antiguas (de 1951 a 1980); y personas mayores que viven solas en viviendas antiguas.

"Esos cuatro componentes responden a la interpretación de cómo se agrupan las 17 variables, entre las cuales destaca la antigüedad de las viviendas. Y a partir de las puntuaciones por secciones censales más vulnerables podemos saber la población que vive en cada una de ellas", sostiene Domene.

Un chico duerme la siesta en plena ola de calor en el Parc del Ocells en L’Hospitalet de Llobregat.

Un chico duerme la siesta en plena ola de calor en el Parc del Ocells en L’Hospitalet de Llobregat. / Laura Guerrero

Las áreas de la Gran BCN más vulnerables al calor

Además de los distritos de Ciutat Vella, Nou Barris y Sants Montjuïc como áreas barcelonesas más vulnerables al calor, la investigación del Institut Metròpoli pone el foco de la vulnerabilidad al calor en diversas ciudades metropolitanas muy densamente pobladas, de L'Hospitalet de Llobregat (51% de la población, unos 133.000 habitantes, viviendo en secciones censales consideradas 'vulnerables') a Santa Coloma de Gramenet (36,71%) pasando por Sant Adrià de Besòs (21,33%), Cornellà de Llobregat (20,62%) o Badalona (18,73%). Entre las ciudades que destaca el estudio, la que menos población registra en áreas vulnerables es Sant Boi de Llobregat (1,1%).

Por barrios, el Institut Metròpoli destaca como demarcaciones más vulnerables a Llefià, Sant Crist, Sant Roc o La Salut (Badalona); Fondo, Can Mariner, Santa Rosa o el Raval (Santa Coloma); La Mina (Sant Adrià de Besòs); o La Torrassa, Pubilla Cases, La Florida, Les Planes, Collblanc o Bellvitge (L'Hospitalet).

También detecta el estudio lo que denominan las investigadoras 'clúster con más vulnerabilidad', el cual resulta de un análisis de correlación espacial que revela focos de agrupaciones censales que, al retroalimentarse entre ellas, adolecen de una vulnerabilidad agravada. Este fenómeno se da, entre otros, en los mencionados distritos barceloneses; en el barrio de Collblanc, en L'Hospitalet; en Sant Ildefons, en Cornellà; o en Fondo, en Santa Coloma, todos ellos territorios con elevada densidad poblacional y con algunas de las secciones censales con las rentas más bajas de Catalunya, según los indicadores socioeconómicos (2020) del Institut d'Estadística de Catalunya.

En los barrios del norte de L'Hospitalet, de hecho, Collblanc entre ellos, se ubican los dos kilómetros cuadrados con más densidad de Europa, tal y como informó EL PERIÓDICO a partir de datos del 'Eurostat', la Oficina Estadística de la Unión Europea (UE), que reafirman que el norte de L'Hospitalet es la zona más densamente poblada de toda la Unión Europea.

Por último, desde el Institut Metròpoli también ponen el foco en los recursos de los que disponen las ciudades por las noches con temperaturas muy elevadas, cuando cierran la mayoría de refugios climáticos interiores del área metropolitana. "Aunque se ha avanzado en los últimos años, detectamos que las ciudades todavía no están preparadas para afrontar el asfixiante calor nocturno", concluye la investigadora Elena Domene.

A 15 minutos de un parque metropolitano

Pese a los 'agujeros' de vulnerabilidad detectados por el Institut Metròpoli, desde el AMB aseguran que la actual Xarxa Metropolitana de Refugis Climàtics (XMRC) alcanza la mayoría de las zonas estudiadas.

Este verano de 2023, "un 80% de la población metropolitana vulnerable [excepto en Barcelona] está a 10 minutos de un refugio climático metropolitano y el 96% a 15 minutos", apuntan fuentes de la administración supramunicipal.

Según datos del AMB, la XMRC ha pasado de 20 refugios en el verano de 2021 a 74 refugios este 2023, de modo que el estudiado IVAC ha operado como herramienta para dirigir la ampliación territorial de la red de refugios.

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