Empresas catalanas reparten pan con tomate por las calles de Tokio

El pan con tomate, ese embajador de la gastronomía catalana tan simple y a la vez tan saludable, conquista este viernes las calles del centro de Tokio. Una veintena de empresas catalanas, que participan en la segunda edición del Catalan Food Street Show en la capital japonesa, reparten esa delicia entre los ciudadanos que se acercan al Daikanyama T-Site, un complejo situado en un de los barrios más céntricos de la ciudad, conocido por sus tiendas 'delicatessen', cafeterías y restaurantes selectos.

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Con esta acción se inicia un fin de semana de divulgación de los productos y de la cocina catalanas en un mercado, el nipón, que es ya uno de los principales importadores de alimentos y bebidas elaborados en Catalunya, con un importe en 2023 de 445,25 millones de euros y un volumen de 134.185 toneladas de productos. En los últimos 10 años, las exportaciones catalanas a ese país han aumentado un 108,25% en valor.

Talleres gastronómicos

La presencia de los productos catalanes, desde vinos, cavas, aceites y vinagres hasta dulces, chocolates, snacks y caldos, se ha complementado con la organización de dos talleres gastronómicos, en Tokio y Kioto, a cargo del chef Josep Barahona y del sumiller Óscar Salmerón. A ellos han asistido distintos profesionales de los sectores de la distribución y restauración y prescriptores japoneses. La previsión de los organizadores de las jornadas, la empresa pública Prodeca, es que durante estos días más de 3.000 consumidores japoneses prueben y compren más de un centenar de referencias de productos catalanes de las firmas participantes.

El mismo Barahona, que lleva ya tres décadas instalado en Japón, donde regenta el restaurante L'Estudi, será el encargado de mostrar este fin de semana 'in situ' cómo se prepara el pan con tomate, que dará a probar a los transeúntes que lo quieran degustar. Será, como en la primera edición del Catalan Food Street Show, en una zona habilitada para catas y degustaciones, donde también habrá una 'foodtruck' y un espacio de bar en el que los visitantes podrán probar otros platos y tapas típicos de Catalunya.

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Japón es actualmente es el décimo mercado de destino de las exportaciones catalanas y el cuarto fuera de la UE y es también uno de los que mayor crecimiento ha experimentado en los últimos años. El país nipón forma parte del paquete de destinos elegidos este año por Prodeca, un organismo dependiente de la Conselleria d'Acció Climàtica i Alimentació, para la promoción en el extranjero de los alimentos catalanes. Estados Unidos, México, Alemania, Reino Unido y Brasil, son otros, pero también Costa de Marfil, Ghana, Nigeria, Zambia, Sudáfrica, Kuwait y Arabia Saudí. En total serán 150 empresas (que se han inscrito previamente en la iniciativa) las que puedan presentar sus producciones en estos lugares estratégicos y, en algunos casos, inéditos hasta ahora.

En la misión japonesa participan los bodegueros Clos Montblanc, Giró Ribot, Blai Peris, Celler Pasanau, Mastinell, Celler Jordi Miró, Celler Kripta-Agustí Torelló Mata, Vinyes dels Aspres, Celler Eudald Massana, Serra i Barceló y Celler Cooperatiu d'Espolla, la elaboradora de cava Maria Oliver Portí, el productor de aceite de oliva Olis Solé y el de vinagre Augustus Fòrum. También están presentes Bubó Barcelona (pastelería), Vichy Catalan Corporation (Aguas embotelladas) Patatas Torres (snacks), Esteban Espuña (embutidos), Aneto (caldos), Cola Cao (chocolates), Granja San Francisco (miel), Valliser (dulce de membrillo), La Moianesa (pasta de galets) y Cerveza Oliba.