INDICADORES DE LA EVOLUCIÓN ECONÓMICA

Bruselas aumenta la previsión de crecimiento de España al 2,3%

MONTSE MARTÍNEZ / BRUSELAS

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Las perspectivas económicas para España en el futuro inmediato serían muy esperanzadoras si no fuera porque la tasa de paro, la segunda más alta de Europa, ensombrece el panorama, y además no se logrará el objetivo de déficit.

Las buenas noticias para la economía española para el año 2015 llegaron ayer desde Bruselas. La Comisión Europea (CE) presentó sus previsiones económicas de invierno y vaticinó que el crecimiento será del 2,3% del producto interior bruto (PIB), seis décimas por encima de lo que pronosticó en otoño, cuando lo situó en el 1,7%. Las previsiones acostumbran a sufrir modificaciones, unas veces al alza, y, la mayoría, a la baja. Pero la previsión de Bruselas con respecto a España es tan halagüeña que supera incluso el 2% de crecimiento señalado por el Gobierno y el  FMI.

La bajada del precio del petróleo, las mejoras en el mercado de trabajo, la facilidad en las condiciones de financiación y la recuperación de la confianza están confluyendo para que España, según la Comisión Europea, aumente la demanda doméstica este año y sea uno de los países de la UE que más crezca. También se verá favorecida, como el resto de socios comunitarios, por la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) de compra de deuda pública recientemente emprendida.

En cuanto a la lacra del paro, la previsión en España para este año es un tasa del 22,5%, un descenso de menos de dos puntos respecto al cierre del 2014. Solo la supera Grecia en toda la UE pero, dentro de lo escandaloso del dato, también puede hacerse una lectura en positivo. En primer lugar, el paro bajará en el 2015 con respecto al año pasado y el empleo que se crea es "sólido", según la Comisión Europea. El comisario de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, abundó en que la tasa de paro tiende a reducirse en la Eurozona pero hay países con "crifras dramáticas" e "inaceptables". Entre ellos, se encuentra España.

El Gobierno español no tardó en agarrarse a la lectura más positiva procedente de la capital comunitaria, hasta el punto de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que ayer visitó la planta de Ford de Almussafes, dijo sentir un "legítimo orgullo" después de que los ciudadanos hayan enfrentado una "dura batalla" para salir de la crisis, informa Laura L. David.

AÑO ELECTORAL

En el apartado del déficit, uno de los indicadores más importantes para los guardianes de la estabilidad económica de la zona euro ubicados en Bruselas, la Comisión prevé para España que se sitúe un 4,5% del PIB en el 2015, lo que supone tres décimas por encima del 4,2% pactado. Los analistas alertan del impacto que puede tener la reforma fiscal y las incertidumbres propias de un año electoral. "Continuamos discutiendo con el Gobierno español cómo podemos reducir la brecha del déficit", apuntó, en tono conciliador, el comisario de Asuntos Económicos. Moscovici constató la aceleración de la economía española pero eludió pronunciarse sobre el panorama político español, en particular, sobre la irrupción del partido Podemos.

"Nunca he considerado unas elecciones como una amenaza", dijo el comisario para añadir que los ciudadanos son libres de elegir  y luego atenerse a las "consecuencias".

RECUPERACIÓN "MODERADA"

Respecto al panorama global de la UE,  la Comisión prevé una recuperación "moderada" para este año, y una aceleración en el 2016. La previsión de crecimiento para la eurozona es de un 1,3% y de un 1,7% en toda la UE  durante el año en curso.

El crecimiento en toda Europa, según este análisis, seguirá limitado por una inversión "débil" y un paro elevado. En este sentido, el comisario de Asuntos Económicos se mostró esperanzado en que el plan de inversión diseñado por la comisión presidida por Jean-Claude Juncker ayude a fortalecer el crecimiento. La bajada del precio del petróleo, la depreciación del euro y la compra de deuda pública del BCE también deben apuntalar la aceleración.