Cacerolada contra el evento

Tensión, porrazos, un detenido y cortes al tráfico en la protesta por el desfile de Louis Vuitton en el Park Güell

Los manifestantes que han cortado la circulación y los antidisturbios han protagonizado momentos de trifulca, sin que los concentrados hayan podido acercarse a la puerta del parque

El desfile de Louis Vuitton en Barcelona, hoy en directo: llegada de invitados al Park Güell y última hora

Tensión, un detenido y cortes al tráfico en la protesta por el desfile de Louis Vuitton en el Park Güell

Tensión, un detenido y cortes al tráfico en la protesta por el desfile de Louis Vuitton en el Park Güell / MARC ASENSIO CLUPES / VÍDEO: ATLAS

Jordi Ribalaygue

Jordi Ribalaygue

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Unas 200 personas se han manifestado este jueves por la tarde en las calles circundantes al perímetro de seguridad tendido en torno al Park Güell durante el desfile de Louis Vuitton, en contra del cierre durante parte del miércoles y de este jueves del recinto monumental, uno de los más conocidos de Barcelona e imán de visitantes. Los concentrados han cortado el tráfico en varios puntos en la marcha por los alrededores del parque y los antidisturbios han llegado a dispersar con golpes de porra a unos manifestantes que han tratado de impedir que unos VTC circularan por la Travessera de Dalt. Los Mossos d'Esquadra han informado que una persona ha sido detenida por atentado contra los agentes de la autoridad. El cuerpo ha añadido que siete agentes han resultado lesionados de diversa consideración, ninguno de ellos grave.

La marca de lujo ha elegido el parque universal ideado por Antoni Gaudí como telón de fondo para exhibir su nueva colección de moda, a modo de aperitivo de la Copa América de vela, que se disputa este próximo verano en la costa de la capital. La concentración -ruidosa, con cacerolas y silbatos- ha sido el colofón a los reproches que plataformas como No a la Copa Amèrica o el Consell Veïnal del Turó de la Rovira y asociaciones de familias de alumnos como la de la escuela Baldiri Reixac -situada dentro del Park Güell- han dirigido al gobierno del alcalde Jaume Collboni en los últimos días, por lo que juzgan como una privatización del espacio público para un evento elitista. Un fuerte blindaje policial -con furgones y drones sobrevolando las calles- ha impedido que los concentrados se acercaran al parque.

No obstante, los manifestantes han cortado la circulación en varias ocasiones en su recorrido. La primera ocasión ha sido a la altura de la Rambla Mercedes con la calle Larrard. Allí han frenado a algunos taxis y otros vehículos durante unos instantes, que iban en dirección al Park Güell. Los concentrados han lanzado algunos petardos y han coreado consignas contra el desfile (“Louis Vuitton tortura y asesina”), contra la masificación turística y contra Collboni. Con algún que otro forcejeo, los mossos han apartado a la multitud para despejar el camino a los conductores. 

Un agente de los Mossos d'Esquadra forcejea con un manifestante cerca del Park Güell, en Barcelona.

Un agente de los Mossos d'Esquadra forcejea con un manifestante cerca del Park Güell, en Barcelona. / MARC ASENSIO CLUPES

Minutos más tarde, los participantes han vuelto a interrumpir el tráfico en la Travessera de Dalt, una de las principales arterias en las proximidades del Park Güell. La comitiva contraria a la pasarela se ha encaminado por la calzada en dirección a la ronda del Guinardó, mientras los antidisturbios le seguía los pasos. Unos metros más tarde, un grupo de personas ha bloqueado el paso a unos VTC, a la altura de un túnel. Los agentes han dispersado a algunos concentrados para que los coches retomaran la marcha. En ese instante se han producido algunos encontronazos y momentos de tensión. Los antidisturbios se han desplegado, mientras los movilizados han seguido en medio de la vía, unos frente a otros durante una media hora. 

Restricciones de paso

Los congregados han criticado las restricciones de acceso que vecinos y familiares de escolares de los centros educativos del entorno del Park Güell han vivido en las dos últimas jornadas. También han protestado por un modelo de turismo que creen desbordado en la ciudad y que causa problemas de masificación en barrios que rodean al recinto monumental, como La Salut y el Carmel.

“Nos han acordonado el barrio entero. Han pedido el DNI a los vecinos para poder ir a su casa y a los padres para sacar a sus hijos de la guardería”, se ha quejado Cesca Sancho, presidenta de la Asociación de Vecinos de Park Güell-La Salut-Sanllehy. “Han alterado la vida normal del barrio y nadie ha dado la cara -ha protestado-. Han vaciado las calles de los coches que los vecinos no han podido sacar y se los ha llevado la grúa. He contado 23 policías, entre mossos y guardia urbana, cuando a veces apenas tenemos dotación cuando hay un accidente o una incidencia... No han dejado subir el 116 a partir de las cuatro, cuando aquí hay mucha gente mayor. ¡Y con unas ‘kärcher’ han rociado todas las piedras del señor Gaudí!”.

Una manifestante contraria al desfile de Louis Vuitton en el Park Güell y un mosso d'esquadra, en Barcelona.

Una manifestante contraria al desfile de Louis Vuitton en el Park Güell y un mosso d'esquadra, en Barcelona. / MARC ASENSIO CLUPES

Rosa Anguas, residente en la zona, afirma que le han pedido la documentación en dos ocasiones este jueves para poder llegar a su casa. “Han incrementado el perímetro esta tarde y hay más vecinos que les ha pasado lo mismo”, ha explicado. Gabriel Picart ha confesado que ha sentido “humillación e impotencia”: “La masificación turística causa molestias, pero no humilla, como nos ha pasado en los últimos días. Dice el Ayuntamiento que el desfile será bueno para traer turismo de calidad, pero es lo contrario: es un reclamo más y vamos en el senido contrario de lo que necesitamos en nuestros barrios”.

Dos concejales de Barcelona en Comú, Janet Sanz y Pau Gonzàlez, han acudido a la protesta. Los Comuns han pedido información a la empresa municipal BSM sobre el contrato de cesión del Park Güell a los organizadores del desfile. "Es una anomalía del funcionamiento ordinario del Ayuntamiento que no se informe de un contrato alegando que tiene cláusulas de confidencialidad. No pasaba desde la época de Xavier Trias, con el proyecto de la Marina del Port Vell", ha señalado Sanz.