Cambio de sede

Macron ofrece a la FIFA condiciones de un paraíso fiscal para instalarse en París

La coalición presidencial presenta una enmienda que exonera del pago de impuestos a las federaciones deportivas internacionales

Benzema se plantea denunciar al ministro de Interior de Francia por injurias

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en una foto de archivo. EFE/ Rubén Peña

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en una foto de archivo. EFE/ Rubén Peña

Enric Bonet

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

¿Las federaciones deportivas internacionales dejarán de pagar impuestos en Francia? Así lo prevé una enmienda presentada el miércoles en los presupuestos del año que viene, debatidos actualmente en la Asamblea Nacional. El presidente francés, Emmanuel Macron, tiene entre ceja y ceja desde hace años que la Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA) cambie su sede de Zúrich a París. Para ello, quiere ofrecerle al organismo del deporte rey unas condiciones dignas de un paraíso fiscal

La enmienda presentada el miércoles exonera a las 34 federaciones internacionales del pago del impuesto de sociedades, de patrimonio y la CVAE —un tributo especial galo sobre el valor añadido de las empresas—. Los trabajadores de estas entidades tampoco pagarán el impuesto sobre la renta durante los primeros cinco años en que vivan en Francia. Se trata de unas condiciones fiscales parecidas, o incluso mejores, a las que dispone actualmente la FIFA en Suiza, uno de los principales paraísos fiscales en el mundo. A pesar de haber registrado un beneficio neto de 2.400 millones de dólares el año pasado, el órgano presidido por Gianni Infantino solo pagó unos impuestos de 22 millones de dólares

Una medida introducida con discreción

“Nuestra idea es que seamos atractivos para todas las federaciones deportivas. Si la FIFA viene, pues genial”, dijo un portavoz de la primera ministra Élisabeth Borne. Según el diario económico Les Echos, esta medida que convertirá a Francia en un paraíso fiscal para los órganos deportivos ya formaba parte del proyecto de ley de los presupuestos que el Ejecutivo centrista presentó a mediados de septiembre ante el Consejo de Estado. Pero luego fue retirada ante las advertencias de ese organismo y debido a su carácter polémico, aún más en una sociedad como la francesa, sensible ante las desigualdades económicas. Finalmente, la coalición macronista la introdujo con cierta discreción esta semana. 

Una parte del presupuesto ya fue aprobada el miércoles a través de un polémico decreto gubernamental. Este recurso al 49.3 —un artículo constitucional que sirve para aprobar medidas sin una votación parlamentaria— probablemente servirá para adoptar el conjunto de la ley de los presupuestos. Lo que permitirá al Gobierno que estos resulten fidedignos al proyecto inicial, inclusive con sus medidas polémicas como los regalos fiscales para la FIFA

¿Un retorno a los orígenes?

Macron e Infantino mantuvieron múltiples conversaciones informales en los últimos años sobre el cambio de sede. El responsable de la FIFA también es partidario de ello, puesto que considera que así dejará atrás los affaires y procesos judiciales que ensuciaron su imagen, sobre todo durante el reinado de Joseph Blatter (1998-2015). De hecho, la entidad instaló una de sus oficinas en 2021 en el Hotel de la Marina en París, lo que se percibió como un preludio de ese posible cambio de sede. Curiosamente, en ese monumental edificio, ubicado en el corazón de la capital francesa, comparten espacio la delegación de la FIFA con una exposición de obras de arte catarí, que pertenecen al emir Al Thani y que se mostrarán allí hasta 2041. 

Sin embargo, no hubo noticias sobre el cambio de sede de la FIFA en los últimos meses. Probablemente, Infantino estaba a la espera de posibles medidas fiscales de este tipo. El órgano del deporte rey fue fundado en París en 1904. Allí tuvo su sede hasta 1932, cuando se trasladó a Zúrich. Un longevo matrimonio con el país helvético que pronto podría romperse.