Restaurante en movimiento

David Muñoz: "No cerramos Goxo en Barcelona, lo trasladamos"

El establecimiento del Hotel NH Collection Constanza ha dejado de ser operativo, a la espera de una nueva ubicación antes del verano

David Muñoz: "He tenido una relación tóxica con Diverxo durante muchísimos años" | PÓDCAST Mesa para dos

David Muñoz se corona por tercera vez seguida como mejor cocinero del mundo

David Muñoz, en el restaurante Goxo, en Barcelona.

David Muñoz, en el restaurante Goxo, en Barcelona. / Ferran Nadeu

Pau Arenós

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El Goxo de Barcelona, el primer restaurante de David Muñoz fuera de Madrid, ha cerrado sus acristaladas puertas en el Hotel NH Collection Constanza después de dos años. Pero no es un adiós a la ciudad, en palabras del cocinero, sino un ‘hasta luego’. “No cerramos Goxo, lo trasladamos”, explica de forma tan breve como contundente.

“Goxo seguirá en Barcelona, con ‘delivery’ y local fijo”, asegura.

Goxo es un concepto con origen pandémico, que tanto en Madrid como en Barcelona tomó impulso bajo el epígrafe de ‘comida para llevar’.

En Barcelona, además, se le destinó un espacio en un hotel gracias a las facilidades dadas por la cadena NH, que en Madrid, en el Eurobuilding, ha alojado hasta la fecha el triestrellado Diverxo, también de inmediato traslado: abrirá durante el 2024 en la urbanización La Finca, en Pozuelo de Alarcón, en un local con 1.900 metros cuadrados.

En la capital seguirán en marcha Streetxo y Ravioxo y, circulando por España, las ‘foodtrucks’.

Los 'udon' Singapur con 'suquet' de Goxo.

Los 'udon' Singapur con 'suquet' de Goxo. / Ferran Nadeu

El Goxo, hasta ahora, estable, tuvo como cometido la “alta cocina vestida de ‘fast food” y generó en el otoño del 2021 pacientes colas para poder acceder a una de las mesas de aquel escenario rojo y negro, según los colores corporativos.

En la oferta, los ‘udon’ con un ‘suquet’ singapurense, la lasaña Mumbai, estrella ‘deliverense’; el cocido Hong Kong-Madrid o el pollo frito “híper crujiente”, en aumentativo de Muñoz.

Bandejas de comida con muchos pasaportes para enguarrar dedos, dispensada a medias entre los rituales de un restaurantes y los inconvenientes de la comida rápida.

La gran barra de Goxo en Barcelona.

La gran barra de Goxo en Barcelona. / Ferran Nadeu

Según cuenta el cocinero, el proyecto tenía fecha de caducidad: “Goxo en NH siempre fue temporal. Lo explicamos desde el primer momento. De hecho, no se invirtió nada en el local ni en la infraestructura. Nuestra intención siempre ha sido buscar otra ubicación”.

¿Y cuándo llegará el Goxo resucitado? “Seguramente antes de verano estaremos operativos de nuevo”. Pero ya no albergados en un NH, sigue.

En busca de local, el chef no quiere marcharse de Barcelona, donde siempre le han tentado para ubicar otros de sus negocios, continuación de los existentes en Madrid o para establecer fórmulas inéditas.  

2023 ha sido un año agitado para el cocinero madrileño, y 2024 no lo será menos: su pareja, Cristina Pedroche, dio a luz a Laia y en México los colegas de profesión le entregaron, por tercera vez, el cetro como mejor chef del mundo. Comienzan, ahora mismo, los días de mudanza.