Historias de Barcelona (VI)

La reliquia que atestigua los orígenes del barrio pescador de Barcelona

Una réplica de la primera piedra se exhibe en una de las últimas casas originales del siglo XVIII que quedan en pie

La primera escalera mecánica de Barcelona

Tiro con arco en la cara oculta de la muralla romana

La Moreneta 'fake' de Barcelona

panot barceloneta

panot barceloneta

David Martínez Herrada (@Historiesdebcn)

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Pocos barrios de Barcelona pueden presumir de conocer con exactitud su fecha de nacimiento. En la Barceloneta, la efeméride se hizo constar en la primera piedra, donde fue grabada la siguiente inscripción: “A la formación de este pueblo se dio prinsipio en 3 de febrero de 1753”. Es decir, que el barrio marinero celebra este año su 270 aniversario.

La piedra fundacional se conserva en el Museu d'Història, aunque puede verse una réplica exacta en el número 6 de la calle Sant Carles. Aquí se ubica el centro cultural Casa de la Barceloneta 1761, más conocido por los vecinos como la Casa del Porró, por el antiguo restaurante que ocupó los bajos. Se trata de un edificio histórico, pues es una de las últimas casas originales, de planta y piso, que quedan del primitivo barrio construido por los militares borbónicos en el siglo XVIII.

Los orígenes de la Barceloneta se remontan a 1715. El entonces capitán general de Catalunya, el marqués de Castel Rodrigo, ordenó construir un barrio para reubicar a los miles de vecinos de la Ribera, cuyas casas habían sido derribadas para levantar la Ciutadella. Irónicamente, le encargó la tarea a Prosper Verboom, el mismo ingeniero que había estado al frente de la construcción de la fortaleza. 

Réplica de la primera piedra de la Barceloneta expuesta en la Casa de la Barceloneta

Réplica de la primera piedra de la Barceloneta expuesta en la Casa de la Barceloneta / Ángel García Martos

El proyecto no se materializó, pero fue recuperado en 1749 por otro capitán general, el marqués de la Mina. Su intención ya no era compensar a los desahuciados de la Ribera, pues habían pasado más de treinta años, sino aliviar la presión demográfica que sufría la ciudad amurallada. El nuevo barrio se emplazó fuera de las murallas, en una lengua de tierra que se había ganado al mar gracias a la sedimentación de arenas provocada por la construcción del dique del puerto. 

La primera piedra se colocó el 3 de febrero de 1753, en una casa situada en el actual paseo de Joan de Borbó, esquina con la calle de la Maquinista. La Barceloneta se construyó siguiendo un plano ortogonal, trazado por el ingeniero militar Juan Martín Cermeño. Constaba de quince calles perpendiculares al puerto y tres transversales, formando alargadas manzanas de casas idénticas.

Todas las viviendas eran de planta baja y un solo piso, para no interferir la acción de las baterías de la Ciutadella. La restricción de altura se fue relajando cuando el barrio quedó fuera de la jurisdicción militar. En 1837 se autorizó la adición de un piso y un siglo más tarde ya había edificios de siete plantas.

De las viviendas originales, sin remontas, apenas quedan una quincena. La Casa de la Barceloneta 1761 es la única con tres fachadas, en las calles de Sant Carles, Sant Miquel y Sant Elm. Fue rehabilitada en 2011, recuperando su aspecto exterior original, para convertirla en un equipamiento municipal dedicado a la difusión de la historia local.

La primera piedra de la Barceloneta, conservada en Museu d'Història (MUHBA)

La primera piedra de la Barceloneta, conservada en Museu d'Història (MUHBA) / David Martínez Herrada

No tuvo tanta suerte la primera casa del barrio, en Joan de Borbó. Funcionó muchos años como cuartel y fue derribada en 2007, tras un tiempo okupada. En el solar se ha levantado, recientemente, otra finca pionera: la primera promoción de covivienda en la Barceloneta.

Suscríbete para seguir leyendo