reacciones sociales ante un tijeretazo muy sensible

El Govern endosa la factura de las becas de comedor a terceros

Trabajadoras y niños en la guardería municipal El Petit Príncep de Manresa, ayer a la hora de la merienda.

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CARLES COLS / TONI SUST
BARCELONA

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La Generalitat cree haber visto la luz al final del túnel, pero en realidad solo es el encendedor de muchos catalanes que buscan una salida a sus penurias. Esto sirve como resumen del conflicto que durante los últimos meses se ha larvado alrededor de las cruciales becas comedor de la escuelas de Catalunya y que esta semana ha saltado por los aires ante la decisión del Consell Comarcal del Baix Llobregat de denunciar que, porque recorta y porque es morosa en el pago, la Generalitat ha terminado por provocar que sus carencias presupuestarias las cubran los ayuntamientos, los consejos comarcales, los propios centros educativos, las empresas de cateringy, en una pirueta difícil de creer, las familias más afectadas por la crisis.

Ayer, tras el primer paso dado por el Baix Llobregat, la comarca que peor lleva esto de la crisis, fue fácil sumarse a la protesta, cifras en mano. L¿Hospitalet decidió aportar de su maltrecha economía 200.000 euros en vista de que las ayudas de Ensenyament eran insuficientes. Badalona, con peor caja, 600.000. Sabadell, 185.000. Pere Navarro, alcalde de Terrassa, asegura que su ayuntamiento llegará allí donde la Generalitat no alcanza, pero avisa de que sobre la mesa hay «un riesgo real de jugar con la salud de los escolares».

PEOR ES POSIBLE / Los alcaldes, en cualquier caso, gestionan fondos públicos. El conflicto se agrava cuando algunas escuelas han comenzado a vaciar la cuenta reservada para imprevistos (reparaciones, etcétera...) porque la aportación de la Generalitat no llega, y empeora aún más cuando la solución que dan algunos centros a los padres más necesitados es que paguen ahora los gastos de comedor con la promesa de que el dinero les será devuelto cuando la administración cumpla con sus compromisos. ¿Puede ser peor? Sí. Fuentes de la Conselleria d¿Ensenyament sugirieron ayer un singular remedio para que las ayudas de comedor cubran todos los días del curso y alcance para todas las familias que lo soliciten: que el importe de la ayuda por niño sea menor.

ÁREA METROPOLITANA L¿Hospitalet sufre el recorte y el impago

El Ayuntamiento de Barcelona presumió el pasado fin de semana de que inyectaba 2,3 millones de euros para que ninguna solicitud justificada de beca de comedor de la ciudad se quedara sin ser atendida. Lo hizo sin precisar que se hace cargo así de una competencia de la Generalitat. Los dos principales municipios que flanquean Barcelona, L¿Hospitalet y Badalona, también han tirado de recursos propios, pero sin presumir.

En L¿Hospitalet se tramitaron a principio de curso 3.700 solicitudes. Al final solo 2.170 pasaron el filtro. El ayuntamiento puso de sus arcas 200.000 euros confiado en que la Generalitat cumpliría su parte. De momento, de los fondos previstos para el primer trimestre (de octubre a diciembre) ha llegado solo un pellizco. En Badalona, de las 1.700 solicitudes aceptadas, el ayuntamiento decidió poner un plus propio para 1.300 casos. Esa decisión, en un municipio con barrios realmente muy castigados, le costó 600.000 euros. C.C.

TARRAGONA Cada escuela negocia como puede

«Cada escuela negocia como puede, igual que nosotros hacemos lo que podemos», resumen fuentes del Consell del Tarragonès, con 2.600 becas concedidas por 1,4 millones. «El dinero llega con cuentagotas». En el Priorat, tiran de pólizas de crédito que ya tenían. «Pero ya nos deben más de un millón y en dos meses, si no llega dinero, nos quedamos sin oxígeno», apunta el presidente comarcal, César López. Solo el Baix Camp está al día, gracias a los ingresos de su planta de compostaje. E. C.

EL EBRO Unos padres avanzan el pago, otros no pueden

El consejo comarcal del Montsià solo ha percibido de la Generalitat una tercera parte del primer 30% de la aportación prevista para desarrollar sus competencias en Ensenyament. Los pagos de las becas de comedor se retrasan desde septiembre pasado. «Algunos colegios piden a los padres que adelanten los pagos, y ya se les devolverá cuando lleguen las ayudas», indican fuentes del consejo. Así lo hacen en la escuela Jaume I de La Sénia, por ejemplo, y en la 21 de Abril de L¿Aldea, en la vecina comarca del Baix Ebre. «Eso tiene una repercusión, y es que algunos padres, como no les viene bien pagar de momento, no envían a sus hijos a comer al colegio, y entonces perderán la beca, y aunque quizás se le acabará otorgando a otro niño, a este le llegará cuando el curso ya se acabe», apunta Manuel Sánchez, presidente de la AMPA de la 21 de Abril. Hay otras asociaciones de padres de alumnos que, de momento, se hacen cargo del retraso. El consejo comarcal del Baix Ebre ha optado por solicitar un crédito para adelantar las ayudas impagadas de noviembre y diciembre pasados. S. B.

GIRONA Las AMPA cubren el coste de momento

Los consejos comarcales de Girona disponen este curso de unas ayudas similares a las del curso anterior. El gran problema son los retrasos en el pago de la Generalitat. El último pago del curso 2010-2011 se cobró el pasado mes de febrero. Los consejos tienen recursos para hacer frente a las demoras, pero los atrasos causan «graves problemas» en los colegios en los que la AMPA ha asumido la gestión del comedor, según explica Jaume Solé, presidente de la FAPAC de Girona. «Las AMPA se están viendo obligadas a hacerse cargo del coste de las becas temporalmente, por lo que algunos centros se están planteando si han de seguir cubriendo esas ayudas», añadió. F. C.

LLEIDA Algunas AMPA ya no pueden más

Sin un euro cobrado para el comedor, las AMPA del Segrià empiezan a ahogarse. «Estamos financiando las becas, algunas AMPA no pueden más», afirma Ismael Alfaro, presidente de la FAPAC en Lleida. Cuenta que el consejo comarcal está a punto de pagar las ayudas de diciembre pasado, porque las becas se aprobaron en noviembre y se abonan con justificantes, una fórmula que las AMPA quieren cambiar para cobrar por adelantado. El consejo ha recibido muchas más solicitudes de ayudas de comedor que el año pasado , pero tiene el mismo presupuesto. Por tanto el porcentaje de las ayudas es menor que antes. R. M.

VALLÈS OCCIDENTAL Un 15% menos de ayudas este curso

La retirada de una aportación extraordinaria de la Generalitat ha supuesto una reducción del 15% de ayudas en materia de becas comedor en el Vallès Occidental, pasando de 6.690 a 5.702 los alumnos becados este curso. Las AMPA ven con preocupación la rebaja, sobre todo si se trata de lo referente a la comida, dado que han detectado casos de menores con problemas de nutrición. Ayuntamientos como los de Terrassa y Sabadell han añadido 30.000 euros a la dotación del consejo comarcal, y la Generalitat aún debe el pago de los primeros plazos de este curso, que cuenta con un presupuesto de tres millones de euros. A. S.